OPINIÓN
Más y mejor educación, más desarollo y crecimiento= mejor país
La media sanción de la llamada "ley antidespidos" accionó las alarmas del gobierno nacional. En tiempos en los que desde el estado se eligió "volver a los mercados", "encorcetar" la libertad empresaria a la hora de definir las plantillas parece al menos contradictorio.Ahora bien, ¿qué supone haber vuelto al
mercado? ¿Es que el gobierno anterior no lo tenía en cuenta? Lo cierto es que
no sólo lo tenía en cuenta, sino que lo tenía demasiado en cuenta, y lo
intervenía en pos de sostener su política económica. Y para lograrlo se podían
decidir políticas encontradas, rectificar el camino, armar "trajes a
medida" según la coyuntura o el sector.
El gobierno actual parece más volcado a
liberar el mercado, a que reine y decida "la oferta y la demanda";
aunque esto no debiera ser tan lineal, ni literal, ni ingenuo...
Los empresarios argentinos están más
acostumbados a las búsquedas de corto plazo que a la inversión sostenida y el
largo plazo. Los permanentes cambios de las reglas del juego pueden jugar a
favor de estas posturas, sin embargo no habrá crecimiento sin proyecto de
inversión sostenida. De esto se trata la economía. Las "tasas chinas"
no pueden ser una constante, sino una excepcionalidad. El crecimiento exponencial de las economías
siempre conlleva el riesgo de la depresión y recesión posterior. Esto es de
manual. Todos los saben, pocos se hacen cargo. Es difícil explicarle a los
ciudadanos de a pie que "los vientos de cola" de la economía mundial
impactan positiva o negativamente en su compra en el supermercado, en la
posibilidad de cambiar el auto o equipar su casa. Pero esto es tan cierto como
inevitable.
Después, está la tarea puertas adentro. A
la gestión y administración nacional, jurisdiccional y municipal de los
recursos; a la honestidad y transparencia de las decisiones y acciones. Aquí
necesitamos menos "indignados televisivos" y más participación y
compromiso.
Necesitamos más ciudadanos críticos, que
pregunten y que indaguen hasta agotar sus dudas y no tantos indignados con poca
información y formación. Si no, todo quedará en el folclore del discurso
oficialista u opositor de la hora. En síntesis, necesitamos crecer , y la única
revolución/evolución que impulsará el crecimiento es mejorar los estándares
educativos. Es una tarea demasiado importante para dejarla solo en manos de
"la escuela". La familia, el lugar trabajo, los clubes y las
creencias y religiones también educan. Manos a la obra.
Buena semana.