La lluvia del último fin de semana otra vez detuvo la pelota. En esa ocasión no se trató de un partido cualquiera, sino de la final del Torneo Clausura 2014: La misma en la que esperan Saint Thomas y El Lauquén. Además, se espera la definición final de la tabla de posiciones desde el 3º al 14º puesto.
Cuando el sábado se empezaron a asomar las primeras nubes, y cada vez se tornó más oscuro el horizonte de la ciudad era predecible la decisión que horas más tarde tomó la Asociación Deportiva Country Canning: "Suspender los partidos de la fecha correspondiente al domingo 30 de noviembre por mal clima.
De esa manera, y tras una semana de espera, saldrán a la cancha los principales protagonistas. Los dos finalistas y el resto de los equipos para determinar en qué posición finalizó el labor realizado durante este semestre.
En el caso del local, Saint Thomas proviene de la Zona 2 y a lo largo de su participación acumuló 15 unidades. De esa manera finalizaron la primera rueda punteros con sólo un partido perdido (ante La Deseada) y cinco victorias.
En lo que corresponde a los Playoff accedió de forma directa a los cuartos de final donde apabulló a Don Joaquín por 8 a 1. Más tarde fue el turno de medirse ante Fincas de San Vicente donde logró la clasificación por penales tras un empate en cero (4-2).
Por otra parte, El Lauquén fue parte de la Zona 1 y empezó su participación en el certamen con el pie izquierdo: Cayó por la mínima diferencia ante La Celia y más tarde ante Malibú. Además de ser derrotado por 4 a 1 ante El Rocío.
Con esos resultados logró la quinta ubicación en la tabla en una participación de siete equipos. A la hora de los Playoff, se impuso en un primer lugar ante Santa Rita, más tarde eliminó a El Rocío desde el punto del penal (4-3) tras un empate en uno y por último en la semifinal goleo 3 a 0 a La Deseada.
De esta manera, ambos finalistas recorrieron un largo camino para llegar a donde están hoy. Quizás uno había iniciado como favorito, pero el otro realizó un trabajo incesante y las pruebas están a la vista. Cuando el árbitro pite el inicio del encuentro todas esas suspicacias quedarán de lado, los dos irán bajo el mismo fin: Cerrar el año de la mejor manera.