Canning |

Una vez más se venció el plazo de finalización de la Ruta 58

La obra comenzó hace dos años y medio, pero está lejos de llegar a su culminación. Este 23 de diciembre se cumplió una nueva fecha de inauguración frustrada.

En febrero de 2015 comenzó a gestarse lo que sería la nueva Ruta 58, una apuesta  en infraestructura de la Provincia para una ciudad que en aquellos años ya presentaba un crecimiento exponencial, y que requería de la ampliación de esta arteria fundamental para el tránsito diario. Por esto, en aquel entonces desde el Ministerio de Infraestructura de la Provincia de Buenos Aires abrieron la convocatoria de licitación y presentaron un presupuesto de casi 70 millones de pesos para lo que un año más tarde se esperaba que fuera un acceso renovado y seguro. 

Así la obra dio el puntapié inicial en los primeros días de septiembre de 2015, en el ocaso de la gestión de Daniel Scioli al frente de la gobernación de la provincia.  

El primer parate que tuvo la ampliación fue a fin de este mismo año, y lo que explicaban desde la empresa era que los pagos no les llegaban, por lo que no tenían otra alternativa. Recién en febrero de 2016 pudo solventarse esta inconveniente, y las máquinas volvieron a aparecer en este punto de Canning. Por aquel entonces ADUES ya tenía un papel fundamental en las tratativas de la obra, y en ese mes desde la Federación explicaban que “se viene siguiendo este tema muy de cerca, ya que es una obra de imperiosa necesidad para la ciudad. Estamos impulsando también para lograr un próximo tramo de la ampliación, que continúe hasta Solar del Bosque y luego hasta la localidad de San Vicente”.  

Corrían los meses y la primera fecha de inauguración se acercaba, todavía con la obra muy prematura. En agosto de 2016, la Provincia no incluyó en el Plan de Obras del siguiente año al presupuesto necesario para la Ruta 58, lo que trajo incertidumbre sobre la continuidad de la ampliación. Más tarde, y con varios tire y afloje de por medio entre el sector público y el privado, anunciaron que la nueva fecha de finalización sería para marzo de 2017.  

Una vez más, el día llegó y los vecinos de Canning continuaban transitando la misma ruta de siempre, con todo lo que ello conlleva: decenas de accidentes y muertes al volante. Pero a pesar de la lentitud y los plazos vencidos, Vialidad Nacional mantuvo un considerable diálogo con ADUES. El ente provincial escuchó la solicitud de la Federación, y en abril anunció la  extensión de la doble mano de la ruta 58  hasta la ruta provincial 16, y no solo hasta la ruta 52 como estaba previsto. Esto incluía también la  construcción de una colectora, mejoramiento de la banquina y reconstrucción de la bicisenda. 

Nuevamente desde la empresa volvieron a informar una fecha de finalización. Esta vez “sí o sí había que terminar la obra para septiembre”, un mes antes de las elecciones legislativas. Los camiones se veían ir y venir con una intensidad inusual, hasta hubo varios atascados en el barro provocado por las lluvias, pero que a pesar de ese estado no cesaron el trabajo. Llegó septiembre, y otra vez incertidumbre.  

No pasó mucho tiempo de esto, y todavía en campaña de cara a las elecciones de octubre, para que un grupo de políticos se acercara a la zona donde los obreros se encontraban trabajando. Fernando Pérez, diputado del PRO, y Rubén Barabani, concejal de Cambiemos, se reunieron para recorrer la obra a pie, y allí mismo confirmaron que “la obra se iba a terminar para el 23 de diciembre” del corriente año, una fecha de finalización que volvió a verse frustrada.  

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