El bar Saeta, ubicado en la esquina de Chile y Perú en el barrio porteño de San Telmo, será declarado de interés cultural por la Legislatura Porteña este miércoles. Su propietario es Lucas Pérez, un vecino de Monte Grande, que restauró el local desde que lo adquirió semiabandonado en el año 2020.
Un vecino de Monte Grande restauró un bar que será declarado de interés cultural
La placa se descubrirá este miércoles en el bar del vecino de Monte Grande ubicado en San Telmo. La declaratoria fue aprobada por la Legislatura Porteña.
09 de septiembre de 2024 - 14:14
La idea de Lucas, gastronómico de 45 años, era que el lugar volviera a tener la esencia del original bar Saeta, que fue fundado en el año 1962 por tres inmigrantes españoles, que lo mantuvieron abierto durante casi 40 años hasta el año 2001, cuando una explosión en la instalación de gas se cobró la vida de un repartidor de gaseosas. A partir de ese momento, el histórico local permaneció cerrado.
"El bar lo adquirí en el año 2019, me puse un poco al tanto de la historia para saber cómo había sido durante tantos años, era un bar de barrio atendido por sus propios dueños, que tenían una relación muy cercanas con los vecinos y que se sintieron muy afectados, culpables sin serlo, después de lo que pasó", relató Lucas, en diálogo con El Diario Sur.
El proceso de restauración quiso recuperar el ambiente de un bar porteño clásico y replicar la imagen que tenía el local al momento de cerrar hace ya más de 20 años. "Tratamos de restaurar todo para respetar la estética original con las puertas, ventanas, muebles, pisos, paredes, ventiladores, luces de tubo", destacó el vecino de Monte Grande, que abrió en bar Saeta en febrero pasado.
"Los vecinos históricos del barrio se emocionaron mucho cuando entraron, fue una cosa de locos, se pusieron a llorar", recordó Lucas, sobre el día que comenzó a funcionar el histórico local de San Telmo. El bar intenta rememorar la gastronomía de un "bodegón porteño de minutas" y ofrece milanesas, arroz con calamares, pastas, entre otros platos, todos elaborados en el lugar. Además de cafetería con tortas, alfajores de maicena, pastafrolas, etc.
Todo el trabajo del bar Saeta rindió sus frutos ya que este miércoles recibirá la declaratoria de interés cultural por parte de la Legislatura Porteña, que pondrá en valor la rica historia del local que restauró Lucas Pérez, vecino de Monte Grande y responsable del Café Martínez del centro de la ciudad. Como testimonio de este hecho, colocarán una placa este miércoles a las 15 en la pared del local, ceremonia a la que están invitados vecinos, clientes y en la que estarán presentes legisladores de la Ciudad.
La historia del vecino de Monte Grande
Lucas Pérez tiene un largo camino en la gastronomía. El hombre de 45 años se recibió de chef en la escuela del Gato Dumas en el año 2001 y desde ese momento siempre trabajó en el rubro.
Comenzó trabajando como cocinero hasta que pudo abrir el bar Bemba frente a la estación de Monte Grande, luego probó suerte con el local de la franquicia de café Martínez en la calle Cardeza, que abrió en el año 2012 y continúa siendo un lugar elegido por los vecinos de la localidad. Finalmente, en el mes de febrero fue el turno del bar Saeta, al que va de martes a domingo, los días en los que está abierto el local ubicado en la esquina de las calles Chile y Perú, en pleno barrio porteño de San Telmo.
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