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Se realizó el vuelo más largo del mundo en el marco de un proyecto científico

Unió las ciudades Nueva York y Sidney volando durante 19 horas sin escalas. Es parte de un proyecto científico para ver cómo reaccionan los pasajeros a esta experiencia.

En busca de comprobar la capacidad del cuerpo humano de adaptarse tras un viaje de más de medio día, la empresa australiana Qantas llevó a cabo este fin de semana el vuelo más largo del mundo. Se trata del primero de tres trayectos experimentales que realizarán en el marco de un proyecto científico.

La ruta elegida para la prueba “piloto” fue de Nueva York a Sidney, con una duración total de 19 horas y 16 minutos, con un trayecto de 16.200 kilómetros, en un Boeing 787-9s. Hasta el momento, el vuelo más largo era ofrecido por SingaporeAirlines y unía la ciudad Singapur con el estado de Newmark, Nueva Jersey en 18 horas y media.

Participaron del primer viaje un total de 50 personas, entre la tripulación y seis voluntarios equipados con tecnología portátil a través de la cual fueron monitoreados para estudiar el impacto de estos largos viajes en su salud. Para ello, siguieron un marcado plan de sueño, comida y bebida, acompañado por movimientos físicos diseñados para contrarrestar el jet lag -trastorno de desfase horario-.

"Los vuelos nocturnos suelen comenzar con una cena y después se apagan las luces. Para este vuelo, comenzamos con el almuerzo y mantuvimos las luces encendidas durante las seis primeras horas para adecuarnos al horario del destino. Eso implica que uno empieza a reducir el desfase horario desde el principio", explicó  Alan Joyce, director ejecutivo de Qantas Group, en un comunicado de la aerolínea tras aterrizar en Sídney.

La investigación cuenta con científicos de la Universidad de Sidney y del Centro de Investigación Cooperativa para la Vigilancia, la Seguridad y la Productividad, dependiente del Gobierno local. No sólo se tienen en cuenta cuestiones de salud y adaptación sino también analizan  la idoneidad de los servicios a bordo.

El objetivo es comenzar a operar vuelos comerciales des de la costa Este de Australia –Sidney, Melbourne y Brisbane- hasta Londres y Nueva York desde el 2020. La aerolínea actualmente ofrece uno de los vuelos más largos del mundo, de 17 horas, entre Perth, en la costa oeste australiana, y Londres.

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