El logo del taller de Temperley “Timbernit” tiene las banderas de Argentina y de Japón, porque combina una técnica del país asiático sobre maderas nacionales. Valentín Robles abrió hace un mes su espacio de trabajo y su showroom especializados en Yakisugi, una técnica de protección de la madera a través del fuego que es tendencia en el mundo.
De Japón a Temperley: el carpintero que utiliza una técnica japonesa que "quema" la madera
Valentín Robles tiene 36 años y hace un mes abrió “Timbernit”, un taller en Temperley en el que trata la madera con Yakisugi, una novedosa técnica japonesa que protege la madera quemándola.
27 de julio de 2024 - 13:00
En diálogo con El Diario Sur, Valentín, vecino de 36 años, contó: “Conocí la técnica Yakisugi por redes, viendo un video de alguien que protegía la madera quemándola y yo en ese momento no tenía laca ni barniz y dije ‘bueno, voy a probar’”. Y luego recordó: “Cuando lo hice quedé flasheado porque quedaba hermoso y cumplía todas sus funciones, la deje a la intemperie y quedó genial”.
Cuando Valentín conoció Yakisugi, en 2015, la técnica aún no era tendencia, había muy poca información disponible y debió investigar. “En ese momento no había mucho material, ni siquiera había tanto en internet, yo estudié una tesis de la Universidad de Ecuador porque fue lo que encontré”, recordó.
Qué es Yakisugi y qué beneficios tiene
Yakisugi es una técnica que tiene la particularidad de proteger de la exposición y los insectos a la madera quemándola sin utilizar otras sustancias, pero además tiene beneficios por su durabilidad. En este sentido, Valentín explicó: “La madera tratada con Yakisugi no la tenés que volver a tratar nunca más, eso es muy importante sobre todo lo que es madera que está expuesta, porque si le das protección con una laca o un barniz, los rayos uv, la lluvia y el viento van quemando la protección, entonces cada dos o tres años tenés que lijar y pintar de nuevo”. El experto en la técnica detalló que se pueden reutilizar maderas y una vez tratada con esta técnica, la madera requiere un mantenimiento mínimo con aceite de lino, un aceite chino o impregnante, “pero nunca más se vuelve a lijar”.
Respecto del tiempo que pueden durar los muebles o pisos, el carpintero detalló: “Las maderas reforestadas que hay en el país que son pino y eucalipto, no son maderas duras pero con este tratamiento se logra que la madera se temple y quede como un hueso, es mucho más dura y más estable, tiene un tiempo de vida de décadas. En Japón hay edificios que tienen tablas de más de 100 años”.
Los productos que vende en www.timbernit.com tienen diferentes precios, las mesas y bancos van desde 80 mil hasta 220 mil pesos. Los precios son accesibles considerando su durabilidad y comparándolo con productos en cadenas como Hendel, donde la silla de madera más económica cuesta 90 mil pesos y las mesas de madera no bajan de 140 mil pesos. También vende diferentes tipos de lámparas de diseño en madera que van desde 30 mil hasta 120 mil pesos, mientras que en la cadena Easy una lámpara con pie de madera cuesta alrededor de 90 mil pesos. Además tiene otra línea de tablas enteras para deck o revestimiento de pared, que varían el precio según técnica y tamaño.
Los orígenes de la técnica
Valentín contó lo que se conoce de los orígenes del Yakisugi y explicó: “La técnica es japonesa, la inventaron las personas que vivían en las costas”. Y luego añadió: “Ellos usaban antiguamente las tablas que quedaban a la intemperie y por un proceso de salinización y por el sol, las maderas quedaban quemadas con unas propiedades parecidas. A partir de eso, idearon esta técnica para emular ese tratamiento”.
Esta técnica antigua asiática actualmente es tendencia en países nórdicos y ya aterrizó en Zona Sur.
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