Detuvieron a otro integrante de una banda de delincuentes que realizaba entraderas en distintos puntos del conurbano bonaerense a partir de copias de llaves que conseguían en un garage. Se trata de un hombre de 38 años, que está sindicado como el coordinador de las tareas, y que operaba estando desde una unidad carcelaria en Florencio Varela, donde estaba ya privado de su libertad por una causa previa.
Copiaban llaves desde un garage: detuvieron a integrante de banda que realizaba entraderas en el conurbano
La banda copiaba llaves de clientes en un garage y realizaba entraderas. El nuevo detenido operaba como coordinador desde la cárcel de Florencio Varela.
08 de agosto de 2025 - 09:37
Esta nueva detención se produjo este miércoles en el marco de un allanamiento ordenado por la fiscal Paula Hertrig, titular de la UFI de Boulogne, y autorizado por el Juzgado de Garantías de San Isidro.
Según consignó Infobae, la orden se desprendió de una línea investigativa que apuntaba al sospechoso como parte de la logística interna del grupo, con tareas de coordinación desde el penal. En ese sentido, durante el procedimiento se incautó un teléfono celular que será peritado por los investigadores.
Así la situación, ya son ocho los integrantes detenidos por formar parte de la banda, algunos de ellos apresados luego de diversos allanamientos en la zona sur, incluida la unidad carcelaria de Lomas de Zamora.
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El caso tuvo su origen en tres robos registrados entre 2021 y 2024 en los partidos de Tigre y San Isidro, donde las víctimas denunciaron que delincuentes habían ingresado a sus domicilios sin forzar puertas ni ventanas. Esa particularidad despertó sospechas porque las cerraduras no presentaban daño alguno y no faltaba ningún juego de llaves. Fue entonces cuando los investigadores de la DDI, en conjunto con la Estación de Policía Departamental de Seguridad de San Isidro, comenzaron a seguir una pista concreta: las llaves utilizadas para ingresar podrían haber sido copias hechas a partir de las originales.
El primer indicio firme surgió en un estacionamiento. Allí trabajaba un hombre de 40 años, considerado el cabecilla de la banda, quien copiaba las llaves que los clientes dejaban dentro de sus vehículos. Junto con la documentación guardada en las guanteras —escrituras, facturas, tarjetas, cédulas— la banda confeccionaba un paquete de información preciso. Luego, con esa base de datos casera, planificaban los robos porque sabían dónde vivía el dueño del auto, conocían sus rutinas y contaban con llaves funcionales para entrar sin ser detectados.
Distintos allanamientos en el conurbano
Así iniciaron los operativos el 7 de julio, que habían permitido detener a siete sospechosos, algunos de los cuales ya se encontraban presas en otras causas. Los arrestos se realizaron en domicilios de Lomas de Zamora, Campana, Morón, San Isidro, y también en las Unidades Carcelarias de Lomas, Campana y Magdalena.
Durante esos allanamientos se secuestraron dos notebooks, teléfonos celulares, un inhibidor de señal, documentación de interés y una réplica de pistola con carga de CO2, presuntamente utilizada para intimidar a las víctimas sin incurrir en tenencia de armas reales.
Ahora el hombre de 38 años se convirtió en el octavo integrante en ser formalmente incorporado al expediente como parte de la organización. La medida fue adoptada luego de que los investigadores lograran determinar que también coordinaba acciones desde el interior del penal, al igual que otros miembros.
