“No, mujer, no llores”, entonaba el mítico Bob Marley en una de sus canciones más populares. Esa frase y un consejo de su hijo le sirvieron como consuelo a la vecina de San Vicente Miriam Ramírez, que sufrió en carne propia el “hate” (odio) de las redes sociales. Fue a partir de que como participante del programa de TV “Los 8 escalones del millón”, dio a conocer que su hijo más chico, de tres años, se llama “Bob Marley”.
Una vecina de San Vicente le puso Bob Marley a su hijo y se volvió viral: su historia
Miriam Ramírez es vecina de San Vicente y participó en "Los 8 escalones del millón". Contó que su hijo de 3 años se llama Bob Marley y se hizo viral.
20 de septiembre de 2022 - 17:35
“El primer día me puse a llorar al ver los comentarios. Jamás en mi vida creí que la gente iba a tener tanta maldad al hablar de otra persona. Decían que porque le puse así a mi hijo iba a ser drogadicto o chorro, y que yo era drogadicta. Yo casi no uso el teléfono porque soy bastante hippie, pero cuando me lo mostró mi hijo me puse re mal”, relató Miriam ante El Diario Sur.
“Al final mi hijo de 17 años me hizo entender que son haters, gente que usa las redes para ser malos. Pero lo más importante para mí es que toda la gente conocida de San Vicente con la que iba hablando me tiraban buenas vibras, me felicitaban. Así que la segunda vez me maté de risa, aprendí mucho”, sumó.
La vecina tiene 36 años y vive en el barrio El Fortín de San Vicente junto a su esposo y sus cinco hijos, de 17, 14, 13 y 12 años. Trabaja como artesana: se dedica a reciclar botellas de vidrio para hacer vasos e incluso incursionó en la construcción de ambientes utilizando botellas. Además, forma parte del plan FINES para completar sus estudios secundarios.
¿Cómo fue que decidió ponerle “Bob Marley” a su hijo? “Mi marido Daniel y yo somos de la cultura rastafari, a los dos nos encanta el reggae. Él no es el padre de mis cuatro hijos, aunque me cría a mis nenas desde los tres años. Y el nuevo bebé fue algo muy especial, tener algo único de los dos. Entonces queríamos buscar un nombre así, que fuera único. Y surgió ponerle Bob Marley, que es algo muy nuestro”, respondió Miriam.
La pareja tenía dudas sobre si la propuesta sería aceptada, pero para su sorpresa, en el Registro Civil de San Vicente se encontraron con otra fan del artista jamaiquino que lo tomó de la mejor manera. Y también recibieron buenas reacciones por parte de sus amigos y familiares.
Miriam dice que ella y su marido toman “la cultura rastafari como un modo de vida que se basa en poder ayudar”. “Siempre que ves a otro hermano que necesita ayuda, se la brindamos si está a nuestro alcance. El rasta siempre trata de dar una buena vibra, una palabra de aliento, ver el lado positivo de las cosas. El universo y Dios siempre devuelven esa energía que uno da”, remarcó la vecina, que disfruta de ir a recitales de reggae junto a su marido y también a “encuentros cannábicos”.
Haciendo un balance sobre su experiencia en la televisión, Miriam no dudó en destacarla como “espectacular”: “Conocí gente muy copada y fue una experiencia muy distinta a lo que es el día a día de una mamá como yo, que arranco a las siete de la mañana para llevar los chicos a la escuela, estoy todo el día yendo y viniendo, y a las seis de la tarde ya entro a estudiar. Por primera vez me sentaron en un camarín, me maquillaron… Me encantó”.
