El Municipio de San Vicente lleva adelante durante esta semana inspecciones y clausuras de puestos de venta de comida callejera que funcionan en el distrito. Esta acción fue impulsada por los casos de intoxicación por carne en mal estado ocurridos en Berazategui, donde murieron dos personas.
Clausuran puestos de comida callejera en San Vicente y Alejandro Korn
El Municipio de San Vicente hizo operativos y decomisaron mercadería. Se da luego de los fallecimientos por carne en mal estado en Berazategui.
El Diario Sur presenció este miércoles un procedimiento que se llevó adelante en la parrilla callejera que se suele ubicar sobre la avenida Presidente Perón, a la altura del predio de Asimra, en Alejandro Korn. Inspectores del área de Bromatología y de Comercio del Municipio labraron un acta con una infracción para el responsable del puesto, y decomisaron la carne que tenía para vender en el lugar.
Con la misma mecánica, durante esta semana hubo otros operativos en puestos de comida ambulantes en San Vicente y Alejandro Korn. Las infracciones labradas ahora están a cargo del Juzgado de Faltas N° 2.
Ninguno de los trabajadores que llevan adelante estas actividades tienen habilitación para hacerlo, dado que en todo el distrito de San Vicente está prohibida la venta de alimentos en la calle.
Según estiman en el Municipio, existen en el distrito alrededor de 50 puestos de comida ambulante. Se ubican principalmente sobre las rutas 210 y 6, y también sobre la Ruta 58, donde hay un importante flujo de trabajadores de los barrios privados.
En ese marco, según adelantaron fuentes del gobierno local, la gestión del intendente Nicolás Mantegazza trabaja actualmente en la redacción de una ordenanza que permita regular la actividad de la venta de comida callejera, con un registro de los emprendedores y la fiscalización de las condiciones de higiene.
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La nueva ordenanza, que debería ser tratada por el Concejo Deliberante, apuntaría a la creación de un registro de vendedores ambulantes de comida, con un cupo máximo. Los emprendedores recibirían asesoramiento y un curso de manipulación de alimentos por parte de profesionales del área de Bromatología. Luego, se controlaría que sus puestos cumplan con condiciones de seguridad e higiene. Deberían ser del estilo de los “food trucks”, con abastecimiento de agua para garantizar la limpieza y de electricidad para posibilitar la refrigeración de la carne en el caso de las parrillas.
El Ejecutivo Local avanzaría en la redacción del proyecto de ordenanza en las próximas semanas y lo enviaría al Concejo Deliberante para que sea tratado. Luego, se iniciaría el trabajo con los vendedores ambulantes. Mientras tanto, aseguran que no permitirán la actividad de los puestos y que serán clausurados cada vez que intenten reabrir.
En la gestión de Mantegazza sostuvieron ante El Diario Sur que esta iniciativa para “ordenar” el sector de la venta de comida callejera ya estaba “en carpeta” desde hace varios meses, y que la situación que surgió en Berazategui aceleró los tiempos. “Es una cuestión de salud pública”, aseguraron. También afirmaron que buscarán ayudar a los emprendedores a mantener sus puestos de trabajo, pero de forma regular.