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Canning: el Club Portugués celebra sus 42 años con una plantada de árboles para "prolongar la vida"

La iniciativa será llevada a cabo durante todo este domingo en la institución de Canning. Los socios se acercarán por turnos y con protocolos para dejar su huella en el parque. Mantienen la unidad.

La numerosa comunidad portuguesa que llegó a Canning hace más de cuatro décadas se encuentra celebrando un nuevo aniversario del club que los reune, fundado en la ciudad el 16 de octubre de 1978. Como todos los años, la institución ubicada sobre la calle Escribano Vázquez y que funciona como punto de reunión de todos los descendientes del país europeo, tenía planeado llevar a cabo su tradicional fiesta, que hace 2 años atrás contó con la presencia del embajador de Portugal en Argentina, João Ribeiro de Almeida.

Sin embargo, debido al panorama del coronavirus, en esta oportunidad tuvieron que reinventar la celebración para seguir de cerca junto a la comunidad portuguesa en tiempos de aislamiento social.

“Por este motivo, junto con la Comisión Directiva, nos pusimos a pensar qué podíamos hacer para no dejar de celebrar, pero continuar respetando los protocolos sanitarios. Así fue como uno de los miembros de la comisión directiva, Juan Dias, propuso la idea de plantar árboles ya que el club tiene un gran espacio verde que carece de sombra en distintos sectores”, contó Otilia Torres, presidenta del Club Portugués de Canning.

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La propuesta de Dias cautivó de inmediato al resto de las autoridades e impulsó a continuar proyectando el evento conmemorativo. “Es por eso que, en el marco de un año difícil para todos, entre tanta enfermedad, tanta tristeza y tanto dolor, seguimos apostando a la vida y a las futuras generaciones plantando árboles”, agregó la presidente.

El proyecto marchó sobre ruedas y rápidamente los socios agotaron la cantidad de espacios disponibles para dejar sus huellas en los terrenos del club: “Vendimos 150 árboles que es el número máximo, para evitar la aglomeración y respetar los protocolos. Sin embargo, en total se plantarán 220 árboles. Estos 70 restantes los plantaremos por cuestiones estéticas que nos recomendó la paisajista”.

El club es punto reunión de cuatro generaciones que buscan mantener vivas las tradiciones de su madre patria. El club es punto reunión de cuatro generaciones que buscan mantener vivas las tradiciones de su madre patria.

Los afiliados concurrirán a lo largo del día con un turno asignado y plantarán sus árboles para luego tomarse una foto de recuerdo al retirarse del establecimiento y mantener a rajatabla los protocolos de bioseguridad.

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“Dejamos preparados los pozos con el arbolito correspondiente para que solamente las personas tengan que plantarlo y cubrirlo con tierra”, detalló la mujer de 59 años y completó: “Al mismo tiempo les colocamos una placa con el nombre de quien lo planta, el de la persona a la que quieran conmemorar o con el del grupo familiar para que lo puedan visitar cuando quieran, a lo largo de los años”.

Tradición y cultura de Canning

La comunidad portuguesa fue unas de las primeras en llegar a la ciudad, cuando había muy pocos habitantes. En ese entonces, los inmigrantes comenzaron a trabajar en las enormes quintas de verduras y también en los característicos hornos de ladrillo de la zona. Con el correr de los años formaron numerosas familias, por eso, decidieron inaugurar este espacio recreativo para realizar sus eventos sociales. 

Una vida al servicio de la comunidad portuguesa

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Otilia Torres tiene 59 años y es hija de Fernando Pereira Torres, uno de los fundadores del Club Portugués, quien actualmente tiene 88 años y sigue siendo miembro activo del club. En octubre del 2012 se convirtió en la primera mujer en alcanzar la presidencia de la entidad.

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