Un inusual incidente tuvo lugar este martes por la mañana en Canning, entre un gimnasio y oficinistas de Las Toscas Office. Desde una ventana del edificio arrojaron un baldazo de agua hacia la clase que se estaba dando en el estacionamiento del lugar -por las protocolos sanitarios-, y mojaron los parlantes con los que se reproducía música.
Escándalo entre un gimnasio y oficinistas de Canning
Durante un entrenamiento con música al aire libre en el estacionamiento de Las Toscas, desde una oficina tiraron un baldazo de agua y causó indignación.
21 de abril de 2021 - 16:17
El problema habría sido justamente por el volumen, que alcanzaba a oírse desde las oficinas. En el entrenamiento, que se daba cerca de las 11, había unos diez alumnos y una profesora. El baldazo cayó de lleno en los equipos de sonido, que para suerte del gimnasio pudieron ser secados sin daños.
"Los que van saben que no es excesivo el volumen y ante reclamos lo bajamos", indicaron desde el gimnasio Kodiak en sus redes sociales, a través de un comunicado. Y continuaron: "No pasaron ya como nosotros por siete meses con las puertas cerradas y la incertidumbre de perder tanto. No pueden bajar, siendo vecinos, a buscar una solución diferente de tirar un balde de agua".
Desde el gimnasio, además, aseguraron que no pudieron determinar de qué oficina tiraron el agua, aunque instaron a los responsables a hacerse cargo.
"Igual con la música bajita pero con mas fuerza que nunca vamos a seguir, luchando por nuestro gimnasio, por dar el mejor servicio a nuestros socios, poder mantener las fuentes de trabajo y honrando nuestra pasión por lo que hacemos día a día", concluyeron.
