La ciudad de Monte Grande fue fundada hace 135 años. Durante todo ese tiempo han pasado personalidades y lugares que ya forman parte de la cultura local. Desde los Santamarina, hasta Amat y el nombre de las calles con gran sentido de propiedad, fueron elementos para darle identidad a la ciudad cabecera del distrito de Esteban Echeverría.
Daniel "Chanchi" Sánchez, el "buscador" de Monte Grande que tiene su propio "museíto"
Este vecino de 61 años tiene una pasión por reconstruir la historia de Monte Grande con objetos, fotos y testimonios. Recibe a la gente en su "museo café".
Con el afán curioso de conocer sobre los apellidos y lugares que le dieron identidad a Monte Grande, Daniel “Chanchi” Sánchez figura como uno de los principales “buscadores” que tomó la tarea de recolectar objetos que son referencia para conocer la historia de la localidad.
“Esto empezó hace 16 años con mi amigo Carlos Farina y la creación del Facebook ‘Monte Grande Ayer’. Me invitó a participar en muestras que él hacía de historia de Monte Grande y ahí me empieza a dar curiosidad de saber el porqué del nombre de negocios y personas de antes. Me empecé a meter y me apasionó”, contó Sánchez, quien recibió a El Diario Sur en el living de su casa que limita con su “museíto”.
“Llegó el momento en el que se me ocurrrió que todo lo que tenía acá no me lo quería guardar solo para mí, sino que se lo quería mostrar a la gente. Por eso armo el museíto café una o dos veces por semana. Esto empezó hace cuatro años y se frenó con la Pandemia. Este año volví a armarlo para mostrarle a los vecinos todas las cosas que junté y vivimos en nuestra infancia y adolescencia”, expresó el hombre de 61 años.
La idea de este “Museíto Café”, como lo denominó Daniel Sánchez, surgió de un deseo propio. “Siempre soñé con un bar temático. Tengo el material, pero no el lugar. Entonces decidí arriesgarme, abrir y recibir a la gente en mi casa para que vea mi colección de cosas que tengo que van desde fotos hasta baldosas de veredas históricas”, señaló.
En cuanto al hobbie de recolectar cosas que encontró en la calle o que los vecinos le regalan, detalló: “No me considero un historiador, yo siempre digo que soy un ‘buscador’. Yo busco cosas que hablen de la historia de Monte Grande y en esto no hay límites. Es un álbum que nunca se llena: siempre hay una figurita que no tenés y ese algo que no podés ubicar. Me gustaría que cada localidad del partido tenga una casa como la mía en donde se pueda exponer o reunir la gente del lugar y hablar de los barrios que se fueron creando”.
Por otro lado, recordó una anécdota poco fortuita en medio de una búsqueda de antigüedades: “Una vez me metieron preso por entrar en un baldío y querer recuperar unas botellas viejas que podían ser históricas. Fue en frente del colegio Parish Robertson. Tuve tanta mala suerte que alguien me vio y llamaron a la Policía. Le expliqué lo que intentaba hacer, pero no me creyeron y me dejaron 12 horas en el calabozo, ja. Ahora me río, pero en ese momento no la pasé tan bien”.
“Mi primera esposa me dejó por las locuras que hacía”
En cuanto a su familia, “Chanchi” tiene dos hijos de 33 y 26 años y está transitando su segundo matrimonio. “Mi primera esposa me dejó por las locuras que hice para recolectar objetos históricos, ja. La actual me conoció cuando ya hacía esto, así que mucho no se puede quejar”, expresó y agregó: “Mis hijos se ríen de mí, pero me bancan en lo que hago. Mi papá si decía que estaba loco, hasta que hice mi primera exposición y ahí le dio rédito a todo lo que estuve haciendo”, cerró.
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