La comunidad de la parroquia "La Anunciación" de Luis Guillón se encuentra de luto desde la tarde del último viernes, cuando falleció Enrico Roncoli, un querido sacerdote que acompañaba a los feligreses de esta localidad desde marzo del 2018.
Conmoción por la muerte de Enrico Roncoli, querido sacerdote de la parroquia de Luis Guillón
El cura de la parroquia "La Anunciación" de Luis Guillón falleció el último viernes, luego de la misa. La huella que dejó en la comunidad.
Enrico tenía 86 años y murió después de la misa de las 19 horas del viernes, luego de descompensarse. El año pasado había celebrado sus 60 años de sacerdocio junto a la comunidad religiosa, y constantemente remarcaba que se encontraba, gracias a Dios, "sano y feliz".
Una de las frases que no se cansaba de repetir y que quedó marcada para siempre en los creyentes de la zona que lo conocieron es "o Cristo o nada". Pero, además de esta enseñanza, también supo dejar una huella en las vidas de las personas a las que acompañó en su fe, quienes aseguran que lo van a recordar como una persona sencilla y alegre a pesar de las dificultades que se le presentaron a lo largo de los años.
El velorio tuvo lugar durante la mañana y tarde del sábado en el mismo templo parroquial. Allí, decenas de feligreses, monjas y curas se acercaron a despedirse del sacerdote. Posteriormente se celebró la misa, en la cual Federico Witzel, párroco de "La Anunciación", recordó a Enrico como una persona alegre y, por sobre todo, obediente. "Nunca dijo que no a ninguna propuesta, siempre estaba dispuesto a todo por el Señor", aseguró.
Al concluir la celebración, todos los presentes despidieron los restos del cura con un fuerte y largo aplauso que fue un claro reconocimiento por todo lo que hizo para la comunidad durante estos años. Finalmente, en la mañana de este lunes le dieron el último adiós en el cementerio de Monte Grande, donde también se celebró una misa con la presencia del obispo de la diócesis de Lomas de Zamora, Monseñor Jorge Lugones.
Cabe destacar que Enrico nació en Génova, Italia, y pertenecía a la Congregación de Hijos de Santa María Inmaculada. A lo largo de su vida brindó su servicio como sacerdote en diferentes comunidades religiosas de Roma, México y Argentina, entre otros sitios.
Después de sus más de 60 años como sacerdote, una enorme cantidad de fieles, de Luis Guillón y del mundo, lo recordarán y seguirán caminando su fe aferrándose a sus palabras y ejemplo de vida.
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