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La historia del comercio más antiguo de Tristán Suárez: hace medio siglo que vende productos sueltos

Jorge Ravone, que también es profesor de historia, abrió su almacén en 1977, cuando la localidad de Tristán Suárez era rural y había “más carros que autos”.

Llegó a Tristán Suárez cuando aún era un pueblo con más carros que autos, y en el que los tambos y los hornos de ladrillos eran la actividad más importante de la localidad. Hoy, casi cincuenta años después, aunque el entorno cambió mucho, Jorge sigue manteniendo abierto su almacén en el centro de la ciudad del partido de Ezeiza.

“Abrimos en una fecha que trae un mal recuerdo para todos los argentinos, un 24 de marzo, pero de 1977”, recordó el comerciante Jorge Ravone, en diálogo con El Diario Sur. “Ahí pusimos un comercio muy chiquito, de productos sueltos, porque en aquel momento estábamos viviendo otra crisis económica y la gente se llevaba los productos fraccionados”, agregó.

Luego de pasar por varios puntos cercanos al centro de Suárez, hace varios años que su local está ubicado en la calle Farina 32, a dos cuadras de la estación. Allí se siguen vendiendo productos sueltos, desde repostería hasta legumbres, frutas disecadas o especias, en los últimos años volcado más hacia el lado de la dietética.

Como el primer día, el local sigue manteniendo el nombre “La Simbólica”, que era una cadena de pequeños almacenes que en la década de los 70 y 80 estaban instalados en todo el país y también en varios puntos de la región, como Monte Grande o Lomas. “Cuando recién instalé el negocio no tenía nada y ellos me ayudaron mucho, por eso decidí mantener el nombre hasta hoy”, rememoró Ravone, quien también fue profesor de historia durante muchos años en escuelas secundarias de Tristán Suárez.

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La entrada del comercio en Tristán Suárez.

La entrada del comercio en Tristán Suárez.

Jorge llegó a la localidad al mismo tiempo que su comercio, que ya es el más antiguo que queda en pie. Muchos son los clientes que desde hace décadas siguen yendo a comprar a “La Simbólica”, los cuales junto a Jorge vieron cómo el pequeño pueblo rural que conocieron en la década del ’70, hoy es una ciudad que continúa en crecimiento.

Aunque Jorge ya pasó por varios momentos complicados en materia económica, incluso su comercio nació en medio de una crisis, ve compleja la actual situación para un local de productos sueltos, que quizás ya no son de primera necesidad. “Es un momento muy complejo y no veo la luz al final del túnel. Pienso que ahora en invierno se va a complicar más”, finalizó.

La historia de Tristán Suárez siempre presente

A pocas cuadras de “La Simbólica”, debajo de las tribunas del estadio del club Tristán Suárez hay un lugar que atesora la historia de la localidad: se trata del Museo de Historia Regional, que fue fundado en 1994 y guarda más de 4000 piezas de interés paleontológico, arqueológico, antropológico, artístico e histórico.

Jorge Ravone es uno de los integrantes de la comisión directiva del museo que funciona en la esquina de las calles Gómez y Farina. “Tiene la particularidad de ser uno de los pocos museos dedicados a una localidad no cabecera municipal y cuenta con doce salas que permiten advertir al visitante los cambios que se dieron a través de los años”, expresó Ravone.

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