Provinciales | motoquero | conductor | auto

"Llevámelo al guacho porque te mato": lo amenazó para que llevara a un herido al hospital

"Llevámelo al guacho porque te mato", le dijo uno de los motoqueros a un automovilista, mientras lo apuntaba con un arma.

Un grupo de jóvenes que viajaban perdidos en auto hasta la localidad de La Reja, en el partido de Moreno, se toparon con un numeroso grupo de motoqueros y pasaron un mal momento.

Sorprendido por todo un movimiento de motos que tapaba el tránsito en ambas manos, uno de los viajantes comenzó a filmar el recorrido en el auto. Mientras el conductor del vehículo trataba de esquivar a los motociclistas para avanzar a marcha lenta, su acompañante le advertía que no era buena idea continuar en esa dirección.

la reja 2.jpg

“Mirá la que hay de motos. Una locura. Están todos re locos”, dijo con preocupación el automovilista al comprobar que le iba a resultar imposible llegar a destino por esa vía. “Hay un accidente, ahí lo tenés”, agregó. Y él mismo se cuestionó: “¿Ahora cómo vamos a pasar?”.

En ese momento cuando un joven vestido con jean y chaleco negro, gorra del mismo color y buzo rosa se acercó hasta la ventanilla del conductor para pedirle y un favor: “Eh, don….se quebró la pata. ¿No me lo lleva rápido que se nos va a a ir? No sea malo”. A lo que el conductor respondió: "Es que no lo puedo llevar, no sé ni donde estoy”.

El motoquero se alejó unos metros del auto y sacó un arma que llevaba escondida entre la ropa y a punta de pistola le gritó: “Llevámelo al guacho. Dale, llevámelo al guacho que se va a ir. Llevámelo al guacho porque te mato. No me importa la gorra”. El conductor cambió de opinión y se comprometió a trasladarlo: “Si, tranquilo”, le respondió.

Llevámelo al guacho porque te mato

A pesar de la respuesta afirmativa, el motoquero seguía enojado. “Llevámelo al guacho, llevámelo al guacho”, repetía mientras le apuntaba con el arma. Debido a la cantidad de motos que había sobre la calle, al hombre se le complicaba circular para llegar hasta donde estaba tendido el herido. “Acercate, acercate, la concha de tu madre”, le exigía al conductor pero sin hacer el espacio necesario para que el hombre pudiera auxiliarlo.

“Uy mira como está”, se lo escuchó decir al conductor cuando la filmación quedó completamente con la pantalla negra. Finalmente, el herido fue subido al auto.

Dejá tu comentario