En San Vicente se contabilizan cien denuncias al mes por parte de víctimas de violencia por razones de género. En 2023, fueron un total de 1.300 a lo largo del año. Desde 2009, que funciona la Comisaría de la Mujer y la Familia, se abrieron 7.500 legajos relacionados a causas violencia machista. Aproximadamente, se puede proyectar que una de cada diez mujeres de la ciudad se vio en la situación de iniciar una denuncia por este flagelo.
Radiografía de la violencia de género en San Vicente: se realizan 100 nuevas denuncias por mes
Alrededor de 1.300 mujeres fueron víctimas de violencia machista el año pasado en San Vicente. Cómo se abordan los casos.
Las denuncias se realizan, por lo general, en la Comisaría de la Mujer y la Familia de San Vicente. Alrededor del 70% son denuncias que tramitan en la Justicia Civil y que están relacionadas con hechos de violencia psicológica. El resto se trata de reportes de hechos en los que hubo violencia física y se derivan al fuero penal.
“Las denuncias siempre terminan en la Dirección de Género en ambos casos, tanto si son civiles como penales, para asesorar a las víctimas sobre cuáles deben ser los pasos legales a seguir”, señaló a El Diario Sur Soledad Mendé, directora de Género y Diversidad del Municipio de San Vicente. “Además, hay personas que se presentan sin denuncia en la Dirección para recibir asesoramiento”, agregó.
En los últimos tiempos, se han intensificado las consultas por violencia de género en el trabajo. Las situaciones que se denunciaron en el último año refieren a maltratos de superiores jerárquicos o de los propios compañeros de trabajo. También sobre casos de acoso sexual en el ámbito laboral. “Nosotras orientamos sobre cuáles son los pasos, se orienta a que la denuncia sea penal, y que intervenga la fiscalía. Si es de algo relacionado al municipio sugerimos la intervención y se hacen propuestas”, aseguró Mendé.
El sector de abordaje de casos de la Dirección de Género y Diversidad es el primer mostrador que está en contacto con las mujeres afectadas por la violencia de género. Allí llegan casos que requieren una atención lo más rápida posible. Cada día llegan a realizar consultas un promedio de 20 personas.
Por otro lado, el sector de capacitación y oficios trabaja para la reinserción laboral de las mujeres víctimas de violencia, con cursos para capacitarse en trabajos relacionados con lo textil, peluquería o jardinería. Actualmente, hay 60 personas estudiando allí.
Asimismo, desde la dirección llevan adelante un trabajo con diferentes especialistas con los hombres que han sido denunciados por actos de violencia de género, dentro del área de Masculinidades para la Equidad. “Suele haber mucha resistencia, algunos vienen porque la Justicia los envía a participar de este espacio”, comentó Érica Schlotthauer, trabajadora social y responsable de este sector, que tiene como objetivo de lograr que el denunciado ya no sea un peligro para la víctima. Como resultado del programa, pasó de haber más de 40 hombres denunciados con tobilleras electrónicas a alrededor de 20, por considerarse que ya no representan un peligro para la víctima.
La historia de Daiana: fue víctima de violencia y ahora ayuda a mujeres que pasan por esa situación
“La mayoría de las mujeres hemos pasado por situaciones de violencia”, aseguró Daiana Gutiérrez, de 32 años, quien hoy trabaja como operadora territorial con perspectiva de género y diversidad en San Vicente. “En la cuarentena tuve una situación de violencia psicológica y simbólica con mi ex pareja. La única salida fue denunciarlo en una comisaría”, expresó.
“Pasar por una situación así me cambió la vida. Físicamente cambié yo no me arreglaba, no salía de casa, ahora estudio, me capacito”, rememoró la vecina de Alejandro Korn. Luego de la denuncia que realizó tomó contacto con el equipo de la Dirección de Géneros, que la incluyó en diferentes actividades y ahora puede ayudar a otras mujeres que están en la misma condición en la que estuvo ella.
“Es emocionante y se me pone la piel de gallina que ahora estoy del otro lado, porque sé muy bien lo que se siente estar del otro lado”, concluyó Daiana.
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