"¿Cómo no lo voy a devolver si no es mío?", sostuvo Gustavo Javier Figueredo, quien tiene 29 años y es remisero en San Vicente, tras tener un gesto que tuvo el reconocimiento de sus compañeros y allegados: una pasajera de 94 años se olvidó el bolso en su auto con una importante suma de dinero, y él decidió devolvérselo.
Un remisero de San Vicente devolvió dinero que se olvidó una pasajera de 94 años: "Era lo poquito que tenía"
Gustavo trabaja en una remisería de San Vicente y le devolvió una importante suma de dinero a una vecina que se olvidó el bolso en su auto.
Según contó a El Diario Sur Gustavo, que trabaja en la remisería Bell, el pasado viernes había ido a buscar a una mujer llamada Graciela y a su madre, Hilda Barros, a la estación de Alejandro Korn para llevarlas a su casa. Todo salió bien y ese fue su último viaje del día. Sin embargo, cuando su pareja se subió junto a su hija al auto, encontró una bolsa que no les pertenecía.
"La revisé para saber de quien era y encontré alrededor de 50 mil pesos y un celular", comentó Gustavo. Luego de llevar a su hija al pediatra, optó por llevarle a Hilda su bolsa.
"Cuando se la entregué a su hija me dijo que creían que la habían perdido. Tenían una alegría enorme y estaban al borde de llorar", contó el remisero. En ese marco, Graciela le pidió que se sacara una foto con ella y su hijo (nieto de Hilda) la publicó en un grupo de Facebook de la zona acompañada por las siguientes palabras:
"Él es Gustavo, remisero de la remisería Bell. Queríamos agradecerle por su buena acción. A mi abuela se le cayó su bolso con dinero en un viaje y él se acercó al domicilio a devolverlo. Por más personas así".
La publicación se difundió rápidamente en la red social y Gustavo, además de buenos comentarios y felicitaciones por su gesto, también recibió críticas: "Me preguntaron por qué devolví el dinero si estoy haciendo mi casa, si mi auto necesita arreglos. Pero uno tiene que pensar en el otro, en lo que le costó juntar esa plata. Yo no me quedaría con nada que sea de otra gente".
Además, el remisero contó que es oriundo de Corrientes y que llegó a Alejandro Korn hace un año buscando trabajo. "Hace dos meses estoy en la remisería y mis compañeros me felicitaron, pero saben que no es la primera vez que lo hago". En ese sentido, recordó que días atrás una chica olvidó un buzo y un gorro de su bebé y también se los llevó a su domicilio.
"Un mes atrás venía de un viaje y vi una cartera tirada en la calle. Tenía una cadenita de oro, plata y una receta del Pami. Vi que la señora se llamaba Inés y cuando encontré la dirección se la llevé a su casa", explicó Gustavo. "La gente no lo puede creer, pero yo sé que eso no es mío y que si soy bueno Dios me va a bendecir con más trabajo", aseguró.
El otro lado de la historia
En cuanto a Hilda Barros, quien tiene 94 años y fue la pasajera protagonista de esta historia, expresó en diálogo con El Diario Sur: "Me gustó mucho la acción de Gustavo. Estoy muy agradecida porque me devolvió lo poquito que tenía ahorrado, lo había llevado para hacerme los anteojos y era lo único que me quedaba".
"Es muy buena persona, ojalá él siempre tenga la misma conducta y esa remisería siempre tenga gente honesta", destacó la vecina de San Vicente.
Por su parte, Graciela, hija de Hilda, quien también estuvo presente ese día y recibió a Gustavo cuando él fue a devolverles sus pertenencias, explicó: "Fue mi culpa, porque yo apoyé la bolsa en el asiento del coche y bajé apurada para ayudar a mi mamá, que se maneja con un carrito". "Yo siempre pido remises ahí porque llevan el carrito en el baúl, otros te dicen que no", sostuvo.
"Cuando me di cuenta de que nos faltaban las cosas, llamé a la remisería, pero Gustavo ya había llegado a mi casa y nos trajo todo", recordó la vecina. "Siempre le vamos a estar agradecidos", concluyó.
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