El 15 de septiembre de 2020, Damián Solari, un joven maquinista del Tren Roca, se subió como todos los días a la formación sin pensar en que iba a ser protagonista de un heroico hecho que le salvó la vida a un nene de apenas 3 años.
El maquinista del Tren Roca que se vistió de héroe y salvó a un nene de ser arrollado en Guernica
Damián Solari es vecino de Longchamps y trabaja desde hace siete años en el Tren Roca. La historia detrás del hecho que conmocionó a todos.
Mientras hacía su recorrido habitual por el ramal Alejandro Korn, el joven oriundo de Longchamps vio algo en las vías que le llamó la atención. “Estaba laburando tranquilo, recién volvía de las vacaciones. Saliendo de Guernica para Glew, veo algo chiquito a lo lejos que se movía en las vías, y pensé que era un perrito”, contó en diálogo con El Diario Sur.
Afortunadamente circulaba a 60 kilómetros, una velocidad baja, y pudo comenzar a frenar. Sin embargo, al acercarse descubrió que no era un animal lo que estaba en las vías, sino un niño pequeño.
“No te puedo explicar lo que sentí en el momento”, expresó el joven de Longchamps, que tiró el freno de emergencia para evitar arrollarlo. “Tenía una desesperación y ganas de llorar”, admitió.
Ya con la formación frenada, decidió sacar una foto para dar cuenta de lo que ocurría, antes de que el nene salga corriendo para regresar con su familia. Luego, dio aviso al Control del Tren Roca para relatar lo ocurrido.
El video se hizo viral y Damián recibió cientos de comentarios que destacaban su labor. Sin embargo, tuvo otra parte que no lo sintió bien: “Me llegaban mensajes de todo el mundo, de todos los canales, fue una invasión terrible”.
Luego de aquel suceso que afortunadamente no terminó en tragedia, el maquinista de Longchamps contó que ni en ese momento ni posteriormente tuvo contacto con el nene de Guernica ni con su familia.
“En ningún momento me bajé de la formación, solo di aviso a Control y esperé a que lo retiren de la vía. La familia no sé si me debe odiar porque la foto se hizo viral o todo lo contrario, pero nunca hablé con ellos. Y eso que paso todos los días por Guernica”, relató.
Si bien este fue el hecho más resonante, no fue la primera vez que vivió un hecho así: “Fue la primera vez con un nene, pero hay mucha gente distraída que está por cruzar o que están al borde del suicidio, y a vos te agarra desesperación. Lo único que podes hacer es tirar el freno de emergencia y queda a la suerte de que el tren llegue a frenar y haya distancia, porque no podes desviar la trayectoria. Es una adrenalina horrible”.