Brown de Adrogué atraviesa un presente irregular en la temporada, pero en el seno del plantel la ilusión está intacta para luchar por la meta de ascender y regresar rápidamente a la Primera Nacional. Así lo hace saber ante El Diario Sur uno de los referentes y reciente refuerzo, el experimentado Fernando Enrique, hijo del campeón mundial Héctor "El Negro" Enrique, que también es vecino de Burzaco.
Fernando Enrique, el hijo del campeón del mundo que sueña en grande con Brown de Adrogué
Fernando Enrique, futbolista de 39 años, apuesta todo para intentar que Brown de Adrogué ascienda. "El objetivo es volver a subir", afirmó.
01 de mayo de 2025 - 13:11
"La gente se acostumbró a jugar en el Nacional. Brown había hecho unos campeonatos bárbaros, e incluso con chances de ascender a Primera. Y después le tocó hacer una mala campaña y se fue al descenso. Por eso ahora el objetivo es volver a subir. Hacer un buen campeonato y salir campeón. Lo que me plantearon desde el primer día que vine, cuando me llamaron, fue eso, que quieren salir campeón, pretenden ascender, así que vamos a hacer todo lo posible", sentenció el mediocampista, que está en su tercer ciclo en el club de Almirante Brown.
A los 39 años, y con un largo recorrido en el mundo del fútbol, especialmente en el Ascenso, los últimos cartuchos los quiere utilizar para brindarle una alegría a los hinchas del Tricolor, como ocurrió hace pocos días, cuando, en pleno clásico, fue uno de los artífices del triunfo sobre San Martín, en Burzaco, en el marco de un cruce que no se daba hace varias décadas. Justamente sobre ese compromiso, indicó: "Esperábamos este partido porque la gente te lo hace saber. Nosotros nos pusimos en su piel a la hora de jugar ese partido. Ganamos y lo festejamos como locos".
Y esa sensación lo marcó, como le ocurrió el año pasado, cuando protagonizó otro clásico zonal que no se disputaba hace mucho. Es que estuvo en cancha cuando Talleres de Remedios de Escalada sorprendió a Banfield por Copa Argentina al vencerlo por penales en la cancha de Quilmes. "Donde vas, donde te toca jugar, siempre hay un clásico, y se disfruta", comentó.
Una campaña complicada
Por lo pronto, la alegría duró poco, porque a los pocos días los dirigidos por Fabián Lisa enfrentaron a Sportivo Italiano, de local, por la quinta fecha del torneo, un choque que había sido suspendido semanas antes. Fue un 0 a 0 que generó bronca y evidencia la irregularidad del equipo, y que se añadió a otro 1 a 1 en casa con Deportivo Armenio. "La realidad es que tenemos que empezar a hacernos fuertes de local. La gente festejó, quedó conforme con el clásico, pero tenemos que seguir sumando y últimamente nos está costando la localía y hay que empezar a revertir eso", comentó.
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La mirada de Enrique se posa en el largo plazo en la temporada. Y así lo entiende al remarcar que "es una categoría muy difícil". "Hay que tratar de ser regular. Nosotros ganamos muchos partidos de visitante pero no logramos afianzarnos como pudimos todavía de local. Si podemos ser un poco más regular, nos tiene que ir bien. Equipo hay, con muy buena gente, con buenos jugadores, y nos propusimos como primer objetivo ganar el Apertura", afirmó.
Familia futbolera
Fernado es de una familia futbolera, con Héctor, su padre, como pilar siendo campeón del mundo en 1986. Pero también están sus tíos: Carlos, de extenso recorrido vistiendo las camisetas de River e Independiente, donde fue campeón de la Copa Libertadores; Ramón, ídolo durante una época complicada de Lanús, o Rubén, de trayectoria en el propio Brown donde hoy se muestra su sobrino. Y ya más acá en el tiempo el más chico de todos, Ramiro, también hijo de Héctor, y hermano de Fernando, que surgió en Banfield y actualmente milita en el fútbol de Estados Unidos.
Con todo ese plafón detrás, Fernando sabe lo verdaderamente importante en el fútbol. Y, por eso apunta, como referente, a ser una guía para los juveniles. "A los más chicos siempre hay que inculcarle lo que es el club, lo que ellos se están jugando individualmente. Hoy el fútbol es muy parejo. La realidad es que si hacés un buen campeonato en la B Metropolitana ya podés saltar a Primera División, porque se ven mucho los partidos, se presta mucha atención al Ascenso de Argentina, incluso desde afuera también. Y los más grandes tenemos siempre el mismo mensaje: hay que ir con seriedad, humildad y trabajo. Si hacen las cosas que tienen que hacer, se meten y lo toman en serio, les tiene que ir bien. Acá hay jugadores que tiene para dar más y jugar más arriba. Y nosotros tenemos que ayudarlos desde donde nos toca", recalcó.
Agónica victoria de Brown de Adrogué en el clásico frente a San Martín de Burzaco
Por último, puntualizó en lo que le hizo determinar su regreso a Brown, casi a los 40 años. "Hace unos años pensaba que me iba a retirar en Talleres. Pero el fútbol va cambiando mucho. Después que me fui estaba con ganas de seguir jugando y pude venir a un club como Brown que ya conozco, donde siempre me trataron muy bien. Cuando me dijeron Brown de Adrogué, no lo dudé. Sabía que tenía que bajar de categoría pero eso no me impidió venir", cerró.
