Mateo Apolonio tiene 15 años, vive en el barrio La Magdalena de Canning desde los 5 y con 14 jugó sus primeros minutos en la Primera del club Deportivo Riestra ante Newell's Old Boys por Copa Argentina, lo que lo convirtió en el jugador más joven en debutar en la historia del fútbol argentino.
Mateo Apolonio, el crack de Canning que se convirtió en el más joven en debutar en el fútbol argentino
Tiene 15 años y el año pasado jugó sus primeros minutos con el equipo principal de Deportivo Riestra. Vive en el barrio La Magdalena y, desde las inferiores, se esfuerza por cumplir su sueño.
En diálogo con El Diario Sur desde su casa de Canning, Mateo recordó su debut, del que se está por cumplir un año, y que captó la atención de todo el mundo futbolero por batir el récord de debutante más joven que hasta entonces tenía nada menos que Sergio “Kun” Agüero. "Cuando pasó fue algo que viví con tranquilidad y lo disfruté, algo que nunca más voy a olvidar. Pase lo que pase estoy con los pies en la tierra, escucho los consejos de mi familia, pero sigo siendo el mismo de siempre", explicó la “joyita”.
En la semana previa a debutar, Mateo jugó en su categoría de novena división, que es la más pequeña en inferiores, y antes del partido fue citado a los entrenamientos de la mayor por el director técnico Cristian Fabbiani, siendo convocado finalmente al cotejo con la Lepra. "Necesitaban jugadores y me citaron, yo claramente estaba sorprendido. Me llegó muy temprano y tuve muchas emociones en poco tiempo”. A su vez, comentó que su familia se emocionó mucho por la noticia: "Cuando mi papá se enteró se puso a llorar, lo mismo mi mamá, que aunque no entiende mucho de fútbol, sabe lo que significa esto para cualquiera que ama este deporte”.
Nació en capital pero desde hace 10 años que vive en el barrio La Magdalena con su padre y aseveró que disfruta mucho de la tranquilidad de vivir en Canning: "Acá es otra vida, tengo la casa de mi mamá allá en capital y es puro movimiento, ruido. Acá es tranquilidad y me acostumbré a estar lejos, pero es hermoso. Mucho verde, sin ruidos, puedo ir a jugar al fútbol, andar en bici, tengo la pileta". Y agregó: "Me encantaría vivir acá toda la vida por la tranquilidad, sea futbolista o no, porque me encariñé mucho con la zona, es mucho más lindo que capital".
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Mateo y su papá
La persona que le inculcó el fútbol en su vida a Mateo fue su padre, Claudio Apolonio, que es un ex jugador de Excursionistas, actual entrenador y contador, y que también compite en la liga de la Asociación Deportiva Country Canning (ADCC) en el senior de Saint Thomas Oeste. Es con él con quien más tiempo le gusta compartir en su vida durante los fines de semana que están juntos. "No soy mucho de juntarme con otra persona, siempre estoy con mi papá y lo que más disfruto es hablar con él en casa o cuando salimos a comer. Tengo la suerte de tener una relación hermosa, me apoya en cualquier decisión que tome y le cuento todo lo que me pasa, trato de disfrutarlo al máximo", afirmó el joven lateral izquierdo.