Después de tres semanas en Estados Unidos, donde participó de un campamento de ciencia y tecnología, Gastón Díaz, alumno de secundaria del Instituto Santa Faz, de Lanús, volvió a Argentina y está en plena cuenta regresiva para la definición sobre el premio al mejor estudiante del mundo, algo que se define en septiembre, y para el que ya está entre los 50 nominados luego de superar una selección entre 11 mil jóvenes de 148 países del mundo. "Estoy muy expectante, la verdad. No quiero ilusionarme, pero creo que hay chances así que estoy muy contento", sentenció.
Joven de Lanús nominado al premio al mejor estudiante del mundo: "Creo que hay chances"
Gastón Díaz, de Lanús, está entre los 50 convocados al Global Studen Prize. Tiene 17 años. En septiembre se conocerá al ganador.
En diálogo con El Diario Sur en el establecimiento educativo ubicado en Lanús Oeste, donde está desde jardín de infantes y ahora transita su último año, palpita la oportunidad de un galardón que se denomina Global Student Prize y que otorga, además del prestigio, una suma de 100 mil dólares. "Sinceramente cuando me enteré no entendía lo que estaba pasando. Estoy entre los 50 mejores y tengo que sentirme orgulloso de que se premió todo lo que hice", comentó, al resaltar que la convocatoria se dio a partir de la presentación de distintos trabajos complejos en diferentes materias.
"Uno a veces piensa que tal vez no es tan importante lo que va haciendo, pero cuando valoran su mérito, su esfuerzo, creo que es algo que está muy bueno porque hace que uno quiera hacer más, siempre intentando cosas más difíciles y nunca quedarse sólo con las cosas que está haciendo. Parece que no vale la pena pero después termina valiendo la pena todo el esfuerzo que uno hace", recalcó.
En ese sentido, puntualizó en cómo se dio ese proceso durante varios meses. "Fue muy largo porque se escriben muchos ensayos, se llenan listas de cuestiones extracurriculares y se suben pruebas de los proyectos que uno hizo", comentó sobre la admisión.
Por lo pronto, indicó que también avanzó por lo que significa la experiencia. "Lo que más me motivo es que muchos amigos que son un poco más grandes que yo habían aplicado y me dijeron que era una experiencia increíble", afirmó.
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Una chance de ensueño
"Mis compañeros me felicitaron, me mandaron un montón de mensajes. Fue algo impresionante que te saluden por la calle, e incluso en Estados Unidos", sostuvo. Esta última referencia al país norteamericano es porque Gastón se enteró de su convocatoria entre los 50 mejores cuando estaba en Washington, en pleno campamento científico.
Sobre esas semanas a kilómetros de distancia de su casa en Lanús, consideró que "fue una experiencia maravillosa". "Fueron 21 días, 3 de ellos en Washington y el resto en West Virginia, que es hermoso, con mucha naturaleza. Fuimos a aprender de los mejores científicos, de emprendedores, tuvimos clases increíbles y pudimos aprender muy de cerca con ellos. Y también fue una oportunidad para hacer intercambio cultural con personas de distintos países y hacer amistades maravillosas", enfatizó, al rememorar desde clases de historia estadounidense hasta excursiones a cuevas de ese territorio inhóspito.
Ya retornado a la zona sur del conurbano piensa en los siguientes pasos. Y el que está en el horizonte es el 27 de agosto, cuando se establezca un recorte y queden los diez mejores estudiantes del mundo de esa lista de 50. En septiembre se sabrá al ganador del premio, que si acaso él tiene la chance de obtenerlo aseguró que lo orientará "a clases de tecnología, más específicamente en robótica y programación".
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Gastón ya sabe sobre esa temática. De hecho, creó hace un tiempo una aplicación llamada Cresify. "Es una plataforma que sirve a empresas que venden a otras empresas y que los ayuda a encontrar clientes que quieren comprar rápidamente, que es un problema en el sector empresarial", comentó. Y sumó otro proyecto vital que lo impulsó a ir por el premio: "Creé una ley de educación financiera que se aplica en distintas ciudades y busca armar talleres para jóvenes sobre finanzas personales y mercados digitales que es un tema fundamental".
Acompañamiento de la familia y la escuela
En plena cuenta regresiva, valora el acompañamiento de la familia y de la propia escuela. "Mi familia está revolucionada. Todavía no creen que estoy entre los 50 mejores del mundo y tuvieron un rol fundamental en que yo llegue a donde estoy ahora porque siempre me fomentaron que participara, que leyera, me dijeron que no me conforme, que vaya siempre un poco más, y ahí está la clave", afirmó.
"Uno no se tiene que limitar, ahí creo que está la clave. Las oportunidades son infinitas, uno siempre se tiene que mandar y eso fue lo que siempre hice, no pensar que algo me puede limitar. Hay que aprovechar las oportunidades que uno tiene y construir a partir de ahí", señaló. Y completó: "Siempre es importante involucrarse, hacer, porque así comienza todo y uno nunca sabe dónde puede llegar. Creo que ese es el mensaje para todos los jóvenes, la clave está en estudiar y seguir los temas que a uno le interesa porque siempre va a haber espacio para uno".
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