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Condenaron a cinco años a la mujer que se robó una beba en Lomas de Zamora

El hecho ocurrió el pasado 14 de diciembre de 2022. La mujer se robó la bebé en Lomas y fue capturada en Luis Guillón.

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°5 de Lomas de Zamora condenó a Erika Castaño, la mujer acusada de robar una bebé recién nacida, a cinco años de prisión tras confirmar que era consciente de sus actos y que no se trataba de una persona inimputable.

El hecho por el cual acusaron y condenaron a Erika Castaño ocurrió en diciembre del 2022. En ese momento, esta mujer se robó una bebé recién nacida del Hospital Alende de Ingeniero Budge y posteriormente fue detenida en la localidad de Luis Guillón, Esteban Echeverría, cuando intentaba sacar un pasaje para fugarse a San Clemente del Tuyú.

La resolución judicial dejó disconforme a la familia de la menor, que esperaba una sentencia mayor para la imputada de 28 años, encontrada culpable de los delitos de "sustracción y retención de menores", y cuyas pericias psicológicas determinaron que era consciente de sus actos, y que, por lo tanto, no se trataba de una persona inimputable.

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La acusada fue condenada por el Tribunal Oral en lo Criminal del Departamento Judicial de Loma de Zamora.

La acusada fue condenada por el Tribunal Oral en lo Criminal del Departamento Judicial de Loma de Zamora.

El hecho

Todo ocurrió el 14 de diciembre del 2022. Ese día, Castaño sustrajo a una beba del hospital Alende vestida de enfermera cuando esta tenía menos de un día de vida. Allí fue que inmediatamente comenzó la búsqueda y lograron advertir la presencia de una sospechosa que se hizo pasar por personal de salud.

Por medio de las cámaras de seguridad, se pudo ver a una mujer que bajaba del ascensor con la pequeña escondida entre su ropa. Tras horas de angustia por parte de la familia, la mujer y la beba, Aylin, fueron encontradas en una terminal de autobuses ubicada en la Ruta 4 y Boulevard Buenos Aires, en Luis Guillón.

Un llamado de una empleada de una estación de servicio, donde la mujer compró leche y fue reconocida por sus visibles nervios, fue clave para atraparla. Allí la interceptaron cuando sacaba un pasaje para viajar ese mismo día hacia San Clemente del Tuyú, lugar donde vivía con sus tres hijos.

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