El pasado miércoles 16 de octubre, la Organización No Gubernamental (ONG) "De Raíz" cumplió 9 años desde su primer día colaborando con asistencia alimentaria para vecinos humildes de Lomas de Zamora, Almirante Brown y alrededores. Una de sus voluntarias, en diálogo con El Diario Sur, relató toda su historia.
La ONG "De Raíz" de Lomas de Zamora cumplió 9 años: su historia
La ONG de Lomas de Zamora "De Raíz" cumplió 9 años de servicio social en distintos sectores del conurbano sur. Esta es su historia.
Su nombre es Sole Grillo, tiene 34 años y forma parte de la ONG desde el primer día, el 16 de octubre del 2015, cuando un par de jóvenes se reunieron tras salir de otras fundaciones y crearon una propia "con la intención de hacer más laburo de territorio con proyectos que teníamos común entre todos. Queríamos hacer algo diferente y formamos 'De Raíz'", manifestó.
"El comedor que tenemos queda en Longchamps (calle Romanella 131), porque no nos limitamos a ayudar sólo a Lomas, además de que fue donde encontramos un lugar de confianza. La sede no física está en Lomas. Es un granito de arena más para ayudar. Esa es nuestra importancia. Todas tenemos un valor importante en donde estemos", expresó.
Cuando nació la fundación, sus integrantes se plantearon dos proyectos diferentes para llevar a cabo: recorridas para ayudar a vecinos en situación de calle y el Proyecto Semillas.
Recorridas por las calles
"La idea era acompañar, contener y ayudar a la gente en situación de calle. La intención principal era hablar, relacionarnos, darles visibilidad. Este proyecto lo pudimos hacer hasta que empezó la pandemia, que tuvimos que frenar. Cuando la cuarentena terminó, el caudal de voluntarios que hacían estas recorridas cayó mucho, por lo que no pudimos continuar", explicó la voluntaria.
Y continuó: "Por suerte, compañeros de otras fundaciones pudieron seguir con las recorridas formando, además, nuevas organizaciones. Ahora, la mayoría de los días están cubiertos para las recorridas para ayudar a la gente en situación de calle. Después del aislamiento éramos dos o tres voluntarias y no podíamos llevarlas a cabo, ya que se enfermaba una y ya no se podía hacer nada. Entonces lo que hicimos fue participar con las otras organizaciones que siguen haciendo recorridas para no abandonar a nuestros 'compas' que están en situación de calle".
Sin embargo, Grillo comentó que una de sus compañeras armó una pequeña organización paralela que realiza recorridos por las calles los días viernes, por lo que también se sumaron a ella para seguir colaborando.
Proyecto Semillas
Según informó la voluntaria, se tratan de talleres de contención e inclusión de los chicos que funcionan a través de actividades artísticas, de salud, informativas, de expresión, etcétera. "El objetivo principal es darle un lugar a los chicos", aseguró. Y recordó: "Empezamos en Ingeniero Budge, donde estuvimos hasta el 2017, que por un tema de espacio y organización nos tuvimos que ir".
Y añadió: "Gracias a un compañero médico llegamos a la Salita Tatú, ubicada en el barrio 14 de Febrero, Longchamps, donde empezamos a dar vueltas por ahí para dar los talleres. Finalmente, nos pudimos ubicar en el comedor/merendero donde nos encontramos ahora. En 2020, al igual que con las 'reco' tuvimos que cortar por la pandemia. Sin embargo, arrancamos a preparar ollas populares por la crisis alimentaria que había, entre otras movidas que hicimos por el barrio".
Actualmente, el comedor donde se encuentra la organización cuenta con la presencia de, por lo menos, 90 chicos, que normalmente reciben meriendas, comidas, entre otras cosas.
En los últimos tiempos, surgieron nuevos proyectos e ideas que movilizan a la ONG, entre ellos se encuentran las colectas mensuales centradas en los alimentos para abastecer el comedor. Grillo ejemplificó: "Este mes hace falta aceite, leche y cacao. Entonces, durante todo el mes, juntamos plata a través de la contribución de la gente para que el segundo o tercer sábado vayamos a un mayorista, compremos mercadería y la llevemos al barrio".
Otro proyecto que mencionó Sole son las colectas anuales: "En los meses de enero y febrero hacemos colectas de útiles para los chicos del comedor. Después hacemos otra colecta de abrigo con ropa específica que nos encargamos de que esté en buen estado, lavada, cocida, que se pueda usar. Para el Día de la Niñez colaboramos con el festejo del comedor con bolsitas de regalos o cosas así y, además, nos juntamos con otras organizaciones y hacemos un festejo para los más de 500 chicos de todo el barrio. Por último, para fin de año también recibimos donaciones, compramos turrones, pan dulces y cosas, y las llevamos todas para el barrio".
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