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Analizan la vuelta a clases presenciales en mayo: reunión de Alberto Fernández y Trotta

Reunidos en la quinta de Olivos, el presidente Alberto Fernández y Nicolás Trotta analizaron distintas alternativas para las clases después del 30 de abril

Luego de la medida dispuesta por el gobierno nacional de suspender por dos semanas la presencialidad en los colegios, días después de que el ministro de Educación, Nicolás Trotta, haya confirmado que las clases presenciales iban a continuar, la máxima autoridad educativa se reunió con el presidente Alberto Fernández en Olivos para analizar la situación y repensar cómo seguirán los colegios después del 30 de abril.

Se trató del segundo encuentro entre ambos en tres días. En medio de la segunda ola de coronavirus y en plena disputa con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que reclama su autonomía por sobre el DNU que limita las clases en toda el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), los dos funcionaron analizaron distintas alternativas para avanzar hacia una “presencialidad administrada”.

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La debate por las clases presenciales fue uno de los temas abordados en la reunión entre el presidente Alberto Fernández y Nicolás Trotta.

La debate por las clases presenciales fue uno de los temas abordados en la reunión entre el presidente Alberto Fernández y Nicolás Trotta.

El objetivo es terminar con la discusión sobre la presencialidad y profundizar otro tipo de medidas que reduzcan la circulación sin afectar la asistencia de los chicos en el aula. A pesar de manifestarse cierta distancia entre jefe de Estado y ministro de Educación, luego de la medida emitida por el presidente sin consultarlo, Trotta finalmente se alineó con la postura de Fernández, en lo que ahora considera “una medida sanitaria”.

En la reunión llevada a cabo en la quinta de Olivos, también se evaluaron las situaciones escolares de otras provincias. En lo que se refiere a la región del AMBA, una de las ideas que se barajan puertas adentro es la de desplegar una agenda administrada, donde los estudiantes concurran tres veces por semana en vez de cinco, por ejemplo, para no cortar con el vínculo entre docente y alumnos. El objetivo de Trotta es evitar una nueva suspensión total de la asistencia a las aulas, lo que podría llevar al oficialismo a otra disputa con el gobierno de la Ciudad.

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