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San Vicente: las mejores amigas de Aimé Castillo la recordaron y contaron la historia del tatuaje que las une

Ludmila, Iara y Rocío eran las mejores amigas de Aimé Castillo. Contaron su vocación por Bomberos y cómo fueron sus últimos días.

Un tatuaje inmortalizaba el vínculo de Aimé Castillo, la joven bombera de San Vicente que fue hallada muerta este lunes, con sus tres amigas de toda la vida: Ludmila, Iara y Rocío. Las tres jóvenes, que conocían a Aimé desde el jardín de infantes, recordaron su vocación de servicio con los bomberos, sus valores como amiga y repasaron cómo fueron sus últimos días.

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“Las cuatro somos muy mejores amigas desde chiquitas”, contó Ludmila Pérez en diálogo con El Diario Sur. Y resaltó el espíritu solidario de Aimé. “Ella te enseñaba siempre a pensar en el otro. Me acuerdo que nos llevaba para que le compartiéramos galletitas a las porteras. Y ahora era igual. Colaboraba con un merendero y estaba siempre muy presente”. “Te daba hasta lo que no tenía, siempre te sorprendía con un detalle y también era de carácter, iba siempre al frente”, señaló, por su parte, Iara Zuccoli.

Las tres amigas destacaron la responsabilidad que sentía Aimé por su tarea en los Bomberos Voluntarios, institución a la que había ingresado hacía más de dos años. “Se desvivía por el cuartel. Cada vez que nos juntábamos sonaba la sirena y la teníamos que acercar en el auto porque ella quería salir a los servicios. No le importaba la hora ni lo que tenía que hacer”, recordó Rocío Elso.

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Aimé Castillo (izquierda) con Ludmila, Iara y Rocío, las cuatro amigas de San Vicente.

Aimé Castillo (izquierda) con Ludmila, Iara y Rocío, las cuatro amigas de San Vicente.

Ludmila sumó que Aimé elegía sus trabajos a partir de la disponibilidad que le dieran para poder asistir a las emergencias. Entre sus últimos empleos, había estado en una heladería y en un salón de fiestas infantiles. También había empezado a formarse como policía y luego en un profesorado de geografía, aunque había abandonado ambas carreras, según contaron las amigas.

En cuanto a su última etapa, Ludmila dijo que el grupo estaba al tanto de su relación con el bombero Daniel Lencina. “Ellos no se escondían porque él ya estaba separado. Aimé tenía proyectos a futuro con él. Nos había comentado que quería plantearle pasar más tiempo juntos”, contó.

Los últimos recuerdos de Aimé Castillo

Sobre el estado de salud de Aimé las amigas aseguran que, antes del suicidio de su pareja el 1° de enero, ella no había dado señales de depresión. “La verdad que todo nos dejó heladas. Siempre fue una persona centrada, madura. Evidentemente se desencadenó todo a partir del suicidio de este muchacho, que ella decía que era su sol”, contó Ludmila.

“El 29 de diciembre ella vino a mi casa para que le hiciera las uñas y se quedó a comer, tomamos fernet, nos reímos mucho como siempre. Fue totalmente inesperado. Se hablaron muchas cosas, como que ellos tenían un pacto suicida, y la verdad que nada que ver, eso no fue así”, sumó Iara.

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Aimé había tenido un primer intento de quitarse la vida el día en que supo del suicidio de su pareja. Estuvo internada en San Vicente y le dieron el alta. “Nosotras fuimos al hospital y vimos a la mamá, y ella después nos escribió que tenía el alta y que se iba a ir a Brandsen”, aseguró Iara. El sábado, la joven salió en bicicleta de la casa de la mamá y finalmente fue hallada muerta este lunes en un campo en Brandsen, en el marco de lo que habría sido un suicidio.

Entre llantos, Rocío recordó que Aimé fue su “primera amiga de jardín”: “Nos sentamos juntas un día y nunca más nos despegamos”. Y detalló cómo surgió la idea del tatuaje: “Estábamos comiendo por mi cumpleaños las cuatro juntas y ahí surgió la idea. Siempre estábamos buscando algo para hacer juntas, para mantener la amistad”. Hoy, las tres amigas ven en ese tatuaje un tesoro con el que podrán llevar siempre a Aimé en la piel.

La carta de despedida de la hermana

Quien también la recordó fue su hermana, Micaela, mediante una carta que marcó con contundencia su sensación. "El amor de tu vida se fue, vos siempre decías que no soportarías nunca algo así", afirmó, en uno de los pasajes del mensaje. Y agregó: "Me avisaste, no es traición", aludiendo a la triste decisión de su hermana.

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El recuerdo de la hermana de Aimé.

El recuerdo de la hermana de Aimé.

"No había rumbo porque todo te quedaba pequeño, siempre fuiste demasiado grande", añadió la joven al referirse a su hermana mayor a la que define como "una romántica, una fiel creyente de la alquimia, dramática y catastrófica".

Y finalmente expone su vínculo como hermana. "Gracias por retarme siempre y defenderme de la basura del mundo. Yo siempre fui la menor a tu lado", y reflejan el sentir de la joven respecto de la decisión de Aimé: "No me abandonaste. No tengo nada por lo que enojarme. Nunca me fallaste".

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