“Algunos dicen que son mosquitos radioactivos, pero no”, aclaró entre risas Mariana Malter Terrada, quien tiene 48 años y es una de las expertas de la Comisión Nacional de Energía Atómica que trabaja en Ezeiza llevando a cabo la implementación de la Técnica del Insecto Estéril, que tiene como objetivo el control del mosquito Aedes Aegypti, vector de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya.
Es por esta razón que hace aproximadamente 10 días atrás se liberaron 25 mil mosquitos fluorescentes en el Barrio Uno. En ese marco, El Diario Sur dialogó con Terrada, quien es jefa del Departamento de Aplicaciones Agropecuarias de la Comisión Nacional de Energía Atómica y trabaja en la Central Atómica de Ezeiza, para despejar dudas al respecto de este proyecto que está en marcha en la región.
“La técnica del insecto estéril se utiliza desde hace muchos años a nivel mundial. En Argentina se usa para el control de moscas de los frutos en la región de Cuyo y la Patagonia”, comentó la profesional. Y detalló: “Se basa en la cría masiva de insectos plagas, donde se separa al macho, que es, en el caso del mosquito, el que no pica ni causa daño”.
Después de este primer paso, Terrada explicó que estos mosquitos machos son “sometidos a radiación para esterilizarlos, pero sin que pierdan sus otras características”. Posteriormente, son liberados en un lugar con el objetivo de controlar la plaga: “Van a competir con los machos salvajes para copular con las hembras, pero sus huevos no van a ser viables, es decir que no van eclosionar ni dar nuevos individuos”.
“Lo que se logra con liberaciones sucesivas y sostenidas en el tiempo es ir disminuyendo la población del mosquito en el sitio y se reducen las probabilidades de contagio de las enfermedades que transmite”, aseguró la profesional.
Cabe destacar que, según explicó Terrada, esta técnica se desarrolla en el Centro Atómico de Ezeiza desde el año 2016, con el apoyo del Organismo Internacional de Energía Atómica.
En la próxima instancia, proyectan liberar alrededor de 70 mil mosquitos por semana: “Lo que tenemos que garantizar es que los encuentros en la cópula sean entre el macho estéril y la hembra. Entonces los machos estériles tienen que ganarle el número a los machos salvajes, por eso las liberaciones deben ser masivas”. Según calculan, aproximadamente cuatro meses debería poder notarse una disminución de los contagios. “La idea es ir sumando distintos sitios de implementación”, concluyó la profesional.
“Es muy importante que no los maten”
“Si los vecinos identifican estos mosquitos, no los maten”, solicitó en diálogo con El Diario Sur Mariana Malter Terrada, quien tiene 48 años y es una de las expertas que trabaja en Ezeiza llevando a cabo la implementación de la Técnica del Insecto Estéril.
Y explicó: “Se trata de mosquitos machos, que son completamente inofensivos porque no pican, solo se alimentan de agua azucarada".
Además, la profesional subrayó que “no se trata de mosquitos radioactivos”: “El mosquito es sometido a radiación de la misma manera en que nosotros podemos ir a hacernos una radiografía. Después de eso claramente no irradiamos radiación a nuestras familias o vecinos, lo mismo ocurre con ellos”.
En esa línea, también aclaró que el color fluorescente que tienen estos insectos no tiene que ver con la radiación: “La coloración se la damos de forma artificial con un polvo específico, como el maquillaje que se utiliza en fiestas infantiles, es completamente inocuo”.
Terrada también detalló que estos mosquitos vuelan tan solo alrededor de 100 metros, dependiendo de las condiciones, y que, si bien en el laboratorio pueden llegar a vivir cerca de tres meses, cuando son liberados suelen sobrevivir entre 5 y 7 días.
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