Dos estudios recientes indicaron que la cantidad de viviendas en oferta para alquileres se redujo en los últimos meses al mismo tiempo que los precios de los arrendamientos de las viviendas han aumentado por encima de la inflación y, en algunas zonas, llegan a estar cotizados en dólares.
El calvario de alquilar se siente en la región: cada vez menos oferta, suba de precios y dolarización
Diferentes estudios mostraron que hay cada vez menos propiedades disponibles para alquilar en Capital y el Conurbano. Las angustias de los inquilinos.
Uno de los estudios en cuestión es el que llevó a cabo la empresa Mercado Libre junto a la Universidad de San Andrés, que revela que en el AMBA sólo el 6% del mercado de la oferta de viviendas está en alquiler mientras que el 94% restante está en venta. En ese contexto, se desprende que hubo una caída del 30% en la oferta de departamentos de 1 y 2 ambientes en el último año.
Por otro lado, otro de los puntos que surgen del análisis realizado es que el aumento de los precios de los arrendamientos supera el índice de precios al consumidor. Hasta el mes de marzo de este año, el promedio del valor del alquiler de un departamento de un ambiente en CABA es de 90.000 pesos, lo que representa un incremento de 138% interanual, mientras que los de 2 ambientes están en 120.000 pesos, con una suba de 144%, y los de 3 ambientes promedian los 210.000 pesos, con un incremento de 144%.
Asimismo, otro de los datos a destacar es que en el AMBA ya se puede observar que más del 50% de los alquileres están en dólares, un fuerte aumento respecto del año anterior, cuando representaban un 32% y, de 2020, cuando sólo eran el 20% de las publicaciones. La modalidad va en aumento, a pesar de que está prohibida por la actual ley, que dispone que los contratos deben ser en moneda local.
En ese sentido, el panorama se volvió sumamente complejo para los inquilinos durante la vigencia de la Ley de Alquileres, que fue sancionada en julio de 2020. “Con la nueva ley se ganaron algunos derechos, algunas herramientas, pero lo cierto es que también -si bien solamente tienen un aumento anual- con el sistema atado a la inflación, lo que produjo es que el ICL, el Indice de Contratos de Locaciones, fuera altísimo. Estamos casi en un 98 % o sea, en una semana va a llegar al 100%. Y eso hace que el inquilino, cuando tiene semejante aumento, tiene que esperar cuatro o cinco meses hasta que se vaya licuando semejante aumento del canon locativo, esperando que vaya subiendo su salario”, destacó Ricardo Botana, presidente de la Unión Argentina de Inquilinos, en diálogo con Infobae.
Por otra parte, sobre la falta de oferta, aseguró: “Hay varias razones para la baja. Por ejemplo, la ley no discrimina entre los diferentes locadores. No es lo mismo un jubilado que tiene un solo inmueble y eso le ayuda a llegar a fin de mes. Si ve que le exigen que sea monotributista y después emitir una factura para seguir alquilando, retira la propiedad del mercado e intenta venderla. Ese es uno de los casos. Y después hay otra cuestión que también incide, que es el tema de las plataformas de alquileres temporarios en los grandes centros urbanos del país (con Airbnb a la cabeza), porque obviamente ahí los locadores perciben el alquiler en dólares”.
De esa manera, un estudio del Centro de Estudios Metropolitanos (CEM), advierte que se profundizó la competencia entre la oferta de alquileres temporarios y la de los permanentes indican que más de 15.000 propiedades en la Ciudad de Buenos Aires fueron a través del mercado de alquileres temporarios. Por otro lado, remarca que durante los últimos cuatro años se produjo un 62% de incremento de las viviendas ofrecidas en ese ámbito.
Los precios de los alquileres
En las zonas céntricas de las ciudades como Monte Grande, Lomas, Burzaco o San Vicente, el precio del alquiler de los monoambientes ronda los 50 mil pesos argentinos. Por otro lado, los departamentos de dos ambientes, también en el centro, tienen un precio estimativo de alrededor de 80 mil pesos, mientras que los departamentos de tres ambientes rondan los 100 mil.
En cuanto a las casas, según informó a El Diario Sur Javier Leoz, quien tiene 57 años y es dueño de “Leoz Propiedades” de Monte Grande, el precio del alquiler supera los 100 mil pesos y depende de distintos factores, como por ejemplo la ubicación, las diferentes comodidades, las condiciones de la vivienda y los servicios que se ofrecen.
Además, Leoz explicó que, principalmente en el caso de los departamentos, el costo no varía tanto en cuanto a la distancia del centro: “No cambia mucho porque en realidad la mayoría de los departamentos están en el centro, y los que están más lejos son edificios nuevos e incluyen cochera, lo que implica un precio similar”.
Duras críticas a la ley de alquileres
“Necesita un cambio urgente, fue lo peor que pudieron haber hecho”, aseguró a El Diario Sur Valentina Bianco, quien tiene 21 años y trabaja en “Bianco Propiedades”, en la localidad de Monte Grande, Esteban Echeverría. En ese marco, agregó: “Los índices de inflación son una locura, al hacer un contrato por tres años los alquileres quedan bajísimos y desfasados, no está bien que se ajuste una vez por año. Tendría que ser algo que se acuerde entre las partes”.
Por su parte, Javier Leoz, de “Leoz Propiedades”, opinó: “Como todos estamos viendo, después de ya casi tres años los resultados exponen que no ha sido una buena ley, la mayoría de los propietarios no quiere alquilar durante tres años y se ven obligados a hacerlo”.
“Una vez terminado el plazo, la mayoría de los inquilinos se retira porque se ven perjudicados por la inflación. No hay formalismos o metodología que puedan ser equitativos tanto con los inquilinos como con los propietarios”, expresó Leoz. Y concluyó: “El dueño se favorece los primeros meses, pero después se ve fuertemente perjudicado. Estamos a la espera de una nueva modificación”
“El contrato es una herramienta para defenderse”
Marina Giménez Pintos (30), vecina de El Jagüel, relató en diálogo con El Diario Sur su experiencia con los alquileres, en este contexto de alta inflación con un contrato que se rige por la Ley de Alquileres.
“El aumento es una vez al año acorde con las paritarias. Lo que tiene de beneficioso para el inquilino el hecho de tener un contrato es que te podés defender, si no lo tenés no hay ninguna herramienta para usar si te quieren sacar de la casa”, aseguró Marina.
La mujer alquila un departamento en el centro de la localidad, donde vive con su pareja hace un año y medio. Empezó pagando $23.000 y ahora abona $49.000 por mes. En ese sentido, destacó el hecho de que el pago del alquiler debe ser en efectivo. “Es engorroso pagarlo en efectivo, tenés que ir dos veces al cajero y hay que ir a pagarlo en efectivo en la inmobiliaria”, finalizó.
El sueño inalcanzable de la casa propia
Leila Cabrera (26), una vecina del barrio Santa Lucía de Monte Grande, alquila una casa de tres ambientes en la que viven ella, su marido y sus dos hijos hace cuatro años. Comenzó pagando $5.000 de alquiler y hoy está abonando $45.000 por mes.
“Me aumentaban cada 6 meses, yo alquilo por dueño directo, y ahora por la inflación me aumentan cada 3 meses”, aseguró Leila en diálogo con El Diario Sur. “Es cada vez más dinero, económicamente nos cuesta bastante afrontar los costos de alquiler y servicios y al mismo tiempo mantener dos hijos”, subrayó.
“En éste último tiempo de enero para acá los aumentos son súper elevados pero buscas otras alternativas y medianamente todo está igual o más caro”, continuó Leila. Al mismo tiempo agregó que “cuesta mucho la verdad y te aleja de la idea de poder llegar a la casa propia porque si tanto te cuesta mantener un alquiler claramente ni pensás en eso”.
En Canning ya no se encuentran alquileres en pesos
Los alquileres de viviendas en barrios cerrados, casaquintas y departamentos en la localidad de Canning se cotizan en dólares, una tendencia que viene en aumento en los últimos tiempos hasta que en la actualidad casi la totalidad de las propiedades que se ofrecen en arrendamiento, lo hacen en moneda extranjera.
Los precios varían entre los 1.000 y los 2.500 dólares, en el caso de casas ubicadas dentro de countries, dependiendo en todo caso de la ubicación y del tamaño de la vivienda, según un relevamiento que pudo realizar El Diario Sur. Asimismo, las casaquintas, que son muy requeridas en la zona para períodos de descanso, tienen un predio promedio de 1.000 dólares por temporada.
En la actualidad, también se han desarrollado algunos desarrollos urbanísticos en los que se construyeron edificios de departamentos, que en su mayoría también se alquilan en dólares. Las unidades pueden conseguirse a un promedio de 800 dólares por mes.
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