La locomotora a vapor 3925, una máquina histórica con casi 100 años de vida, tuvo un nuevo recorrido de prueba por las vías del Tren Roca. Y en esta oportunidad su destino fue Brandsen, en un itinerario que empezó en los talleres ferroviarios de Remedios de Escalada, y que vivenció una madrugada de ensueño para todos los ferroaficionados.
La locomotora a vapor recorrió las vías del Roca y llegó hasta Brandsen
La locomotora a vapor reparada en Remedios de Escalada tuvo un nuevo recorrido por zona sur. Su destino fue Brandsen durante la madrugada del miércoles.
El recorrido estaba estipulado para sostenerse hace unos días, pero finalmente por cuestiones operativas se concretó este miércoles. En ese sentido, el viaje fue satisfactorio, según puntualizaron desde el Ferroclub de Escalada, la organización que es la artífice del diseño, ya que fue reparada durante más de 20 años para que comience a circular por las vías. Y permitió observar cómo se movía la formación, a sabiendas que se tiene como objetivo en el corto plazo poder realizar excursiones hacia Mar del Plata, y por eso este tipo de ensayos.
En esta ocasión el desafío planteado era llegar hasta Brandsen, a poco más de 50 kilómetros de distancia de la localidad de Lanús, y la expectativa radicaba en analizar variantes de velocidad para exigir a la máquina y conseguir su puesta a punto ideal. Así fue como cerca de las 4.30 de la mañana se volvió a Remedios de Escalada, ante la mirada atenta no sólo de fanáticos de los trenes sino también de vecinos en general que disfrutaron de un momento especial para arrancar una intensa jornada.
El camino sostenido por la locomotora empezó justamente en el Ferroclub poco después de las 12 de la noche del martes y siguió por las vías en el ramal hacia Alejandro Korn, con una parada técnica en Temperley para realizar controles pertinentes y finalmente el trayecto hacia Brandsen para después afrontar el retorno por el mismo circuito.
Un viaje extenso para la locomotora a vapor
En primer término, en torno al viaje que se iba a concretar la semana pasada, el destino era Altamirano, un poco más lejos del punto inicial, aunque se optó por reducir el margen de maniobra. Por lo pronto, fue más extenso que el anterior, que se había establecido hace poco más de un mes. En aquella ocasión se fue hasta el triángulo de inversión en zona sur porque salió de la estación de trenes de Escalada, tomó el ramal Haedo, pasó por la puerta del Parque Finky, y de ahí por una vía que permite retroceder; en tanto que luego pasó por frente de los transformadores que se ven desde las vías principales cuando la gente toma los trenes para Glew o Ezeiza; y volvió nuevamente para la estación de Temperley. Ahora ese trayecto a Temperley sirvió como parada técnica y luego seguir hasta Alejandro Korn, para completar todo en Brandsen.
Los resultados del viaje posibilitaron tener todo en orden para emprender excursión a la costa atlántica, chance prevista para algunas semanas, en el marco del 139 aniversario de la llegada del ferrocarril a Mar del Plata, lo que sería un hito para la locomotora 3925.