Nélida Ortiz, vecina de Monte Grande, falleció el pasado 17 de julio a los 103 años. A lo largo de su vida, fue reconocida por su compromiso con la democracia: votó en todas las elecciones desde la sanción del voto femenino y lo hizo por última vez en octubre de 2023, cuando tenía 101 años.
Monte Grande: el recuerdo de Nélida Ortiz, la vecina de 103 años que nunca dejó de votar
La vecina de Monte Grande murió en julio de este año. Ejerció su derecho toda su vida, desde la llegada del voto femenino. Hoy su nieta fue autoridad de mesa.
“Mi abuela siempre quería ejercer su derecho al voto, disfrutaba de ir a votar”, contó su nieta Mariela a El Diario Sur. Este domingo, en el marco de las elecciones, Mariela fue autoridad de mesa y eligió dedicarle su jornada a la memoria de Nélida.
Nélida votó por primera vez en 1951, cuando las mujeres argentinas pudieron hacerlo por ley. Desde entonces, no faltó nunca a una elección. En diálogo con este medio, Mariela recordó que “ella sostenía que defender la democracia era una forma de cuidar a su familia y a su país”.
En las elecciones de 2023, Nélida había concurrido a votar en la Escuela N°4 de Monte Grande. “Siempre voté, desde que existe el voto femenino”, dijo en aquel entonces. A pesar de tener más de 100 años y dificultades de movilidad, insistió en participar. “Es todo un acontecimiento, vino toda la familia. Ella votó contenta por la patria, por el país y por los descendientes”, contó en ese momento Miriam, otra de sus nietas.
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“La honro defendiendo la democracia”
“En mi caso me tocó ser autoridad de mesa, y si bien el rol es pesado, lo hago con la convicción de que esto haría mi abuela”, expresó Mariela. “Ella siempre sostuvo que había que defender la democracia con el voto y con las acciones. Yo la honro desde el lugar que me toca”.
Además, recordó que su abuela celebró su último cumpleaños, el 6 de mayo, junto a toda su familia. “Nos agradeció a todos y nos dijo que nos quería mucho. Ahora veo el video y lo siento como una despedida”, relató. Nélida nació en Santa Fe, pero vivió casi toda su vida en Monte Grande. Se casó a los 16 años, tuvo siete hijos y nueve bisnietos.
Su historia quedó grabada en la memoria del barrio. Este domingo electoral, su nieta la recordó desde el mismo compromiso que marcó su vida: “Te honro, abuela Nelly, defendiendo la democracia desde el lugar que yo pueda hacerlo”.


