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Las subas de los alquileres se acercan al 70%: un castigo para los inquilinos de la región

Aumentaron un 65% en septiembre y se espera más del 70% para octubre. Desde las inmobiliarias de la zona critican a la Ley de Alquileres. En promedio, los departamentos más accesibles parten de los $35.000.

Quienes renovaron o iniciaron su contrato de alquiler este mes se llevaron una desagradable sorpresa. Los arrendamientos de viviendas aumentaron en septiembre un 64,66 por ciento, en cumplimiento de la última Ley de Alquileres que establece un incremento en los contratos una vez por año. En tanto, se calcula que quienes hagan esas operaciones en octubre, tendrán que afrontar una suba superior al 70%.

Este aumento se calcula mediante “un índice conformado por partes iguales por las variaciones mensuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE)”. Es decir, la modificación de los precios debería quedar en un punto medio entre lo que haya avanzado en un año la inflación general y los salarios de los trabajadores registrados en relación de dependencia.

“Es una situación difícil, los alquileres venían de contratos anteriores con valores muy bajos ya que la inflación de estos últimos años fue inesperada. Con la nueva Ley de Alquileres, se esperaban índices de ajustes bajos, lo cual no fue así”, relató Valentina Bianco, de la inmobiliaria Bianco de Luis Guillón, sobre la situación que genera la norma que regula las locaciones desde el año 2020.

“Los inquilinos quedan realmente sorprendidos con los aumentos y los propietarios no pueden recuperar el capital por el ritmo de la inflación. Nosotros estamos en el medio, se vive mucho conflicto y cada uno tiene una situación distinta. La Ley de Alquileres terminó perjudicando a ambos sectores: inquilinos y propietarios”, agregó Bianco.

La oferta de casas y departamentos en alquiler ha disminuido mucho por esta problemática, ya que los propietarios prefieren vender o hacer otras operaciones con las viviendas debido a que perciben que no es rentable. “Es una realidad que nunca se había visto”, afirmó Bianco.

En cuanto a la demanda la situación varía según la zona. Mientras que en las localidades más grandes es muy difícil conseguir un sitio para alquilar, en los lugares más alejados de Capital Federal la situación es muy diferente. Por ejemplo, en Ezeiza algunos inquilinos han decidido retirarse paulatinamente del mercado por las subas desmedidas en los precios. “Los jóvenes prefieren volver a vivir con sus padres o incluso lo hacen familias con hijos por no poder pagar el alquiler”, describió Natalia Medrano, socia de la Inmobiliaria Vidal, ubicada en esa localidad del Conurbano.

“Los jóvenes prefieren volver a vivir con sus padres o incluso lo hacen familias con hijos por no poder pagar el alquiler”, dice Natalia Medrano, socia de una inmobiliaria en Ezeiza. “Los jóvenes prefieren volver a vivir con sus padres o incluso lo hacen familias con hijos por no poder pagar el alquiler”, dice Natalia Medrano, socia de una inmobiliaria en Ezeiza.

Otro de los fenómenos que se da en esa zona es el alquiler de casas en countries o casaquintas para la temporada de verano en lugares como Canning, La Unión o San Vicente. En estos casos los contratos, dirigidos a un público muy exclusivo, se cotizan en dólares y el alquiler de una vivienda en un country de zona sur está en un promedio de U$S 2000 por mes.

La visión de las inmobiliarias es que se debe modificar la Ley de Alquileres para poder normalizar el mercado y que se puedan conseguir viviendas a un precio razonable, acorde al poder adquisitivo de los inquilinos. “Tienen que cambiar de alguna forma la ley. Además, bajar la inflación porque no hay préstamos ni ahorros, algo importante para que funcione el mercado inmobiliario”, finalizó la profesional de Ezeiza.

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Desde las asociaciones que defienden los derechos de los inquilinos plantearon su inquietud por la desigualdad en materia de acceso a la vivienda y creen que la Ley de Alquileres puede equilibrar la balanza en ese sentido. “Las propiedades están dolarizadas, el precio de los alquileres está desregulado, por eso creo que la ley es un freno a la desregulación total porque alquilar hoy es un abuso por parte del mercado inmobiliario”, aseguró Gervasio Muñoz, presidente de la Federación Nacional de Inquilinos, en declaraciones a Radio Perfil.

Los precios de los alquileres en la región, a partir de los $35.000

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Ejemplos del sitio ZonaProp: los alquileres en Monte Grande parten de los $35.000 y llegan hasta $75.000.

Ejemplos del sitio ZonaProp: los alquileres en Monte Grande parten de los $35.000 y llegan hasta $75.000.

El precio de partida de una vivienda a alquilar cerca del centro de Monte Grande, con dos dormitorios, está en el orden de los $65.000. En tanto que el precio de los departamentos en esa localidad se encuentra entre los $35.000 y los $75.000, dependiendo del número de ambientes y de la cercanía con la estación. Lo propio ocurre en Lomas de Zamora y en Lanús, sin registrarse demasiadas variaciones entre las ciudades. Un departamento de dos ambientes con cochera en esta última localidad puede conseguirse a $60.000, en una ubicación muy buena.

En algunas localidades más periféricas como Longchamps, Tristán Suárez o Glew es posible encontrar viviendas a un precio más accesible, incluso con espacios verdes. Por ejemplo, en Glew es posible alquilar una vivienda de 4 ambientes a $35.000, en una zona céntrica de la ciudad.

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