El Ballet San Vicente viajará este viernes a la ciudad de El Dorado, provincia de Misiones, para participar del 7° Festival Provincial de Guitarras, que se realizará el domingo 12 de octubre, una experiencia que combina danza y los lazos familiares que identifican a la institución. "Estamos re ansiosos", aseguró su directora, Cintia Muñoz, en conversación con El Diario Sur.
El Ballet San Vicente viaja a Misiones para el Festival de Guitarras: "Estamos re ansiosos"
El Ballet San Vicente fue invitado al 7° Festival Provincial de Guitarras. Viajan 60 bailarines con cuadros de danzas y malambo.
07 de octubre de 2025 - 13:43
Es la segunda vez que participarán y los ensayos se intensificaron para la ocasión: “Hace ya varias semanas que venimos con ensayos generales, con todos los bailarines juntos. En los cuadros que presentamos bailan todas las categorías, desde los más chiquitos hasta los adultos, y eso requiere mucho trabajo de coordinación”, explicó la directora. Para esta nueva presentación, el grupo preparó dos cuadros de danzas y uno de malambo.
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Actualmente cuenta con unos 60 integrantes, desde niños hasta adultos. Según Cintia se sostienes a través de una estructura comunitaria en la que se involucran mucho las familias: “Hay hermanos, matrimonios, padres e hijos, y eso hace que el grupo sea muy unido. Es un ambiente súper familiar”, expresó Cintia.
El Ballet San Vicente comenzó hace 17 años con Cintia y su hermana dando clases a un pequeño grupo de adultos en el centro tradicionalista El Volcador. Con el tiempo, la iniciativa creció hasta consolidarse como una institución organizada: primero como entidad de bien público, luego como asociación civil. Hoy, el ballet cuenta con un terreno propio, cedido por el municipio, donde planean construir un espacio para ensayos y eventos.
Tres generaciones comparten su pasión en el Ballet San Vicente
Emma Córdoba, una de las bailarinas, contó que tiene “siete hijos, y todos pasaron por el Ballet San Vicente”, hoy baila con su hijo mayor y dos de sus nietos. Emma valora la presencia del ballet en su familia: “Tuve la suerte de que todos aprendieron acá y muchos siguieron bailando folclore”.
Emma también destacó el valor de pertenecer al grupo y el acompañamiento que encontró en sus compañeros: “Tuve la desgracia de ser viuda, y la contención que tuve con este grupo fue inmensa. Es disfrutar lo que te gusta, pero también sentirte acompañado. Realmente somos una gran familia”.
Con 17 años de trayectoria, el Ballet San Vicente mantiene su esencia comunitaria y su compromiso con la cultura local. “Nuestro desafío más grande fue sostenernos en el tiempo”, reflexionó Cintia. “Lo logramos gracias al trabajo colectivo y al amor por lo que hacemos. Viajar a Misiones es una forma de mostrar ese esfuerzo y de seguir creciendo”.
